La semana pasada el presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), Sergio Clavijo, sostuvo que una de las medidas para solucionar el problema pensional en Colombia es el cierre de Colpensiones entidad que representa al Régimen de Prima Media.

La propuesta no fue muy bien recibida por el presidente de Colpensiones, Mauricio Olivera, quien dijo que la entidad seguirá “protegiendo la vejez de todos los ciudadanos”, pese a las críticas hechas.

Uno de los argumentos usados por Clavijo fue que la entidad estatal no es viable financieramente, a lo que Olivera contestó que “Colpensiones es financieramente sólida, en cuatro años resolvimos lo que al Instituto de Seguros Sociales (ISS) le hubiera tardado seis años; es decir, le ahorramos al país dos años de administración que equivalen a más de $1 billón”.

Lo que dice Anif según su comentario económico es que se debe hacer el cierre inmediato de Colpensiones, honrando todos los compromisos pensionales adquiridos hasta la fecha. “Como ya lo explicamos, ello tendría la doble virtud de convertir gasto público excesivo y regresivo, en gasto más focalizado en las necesidades sociales. Con frecuencia se afirma que el cierre de Colpensiones implicaría “poner conejo” a las pensiones ya otorgadas, pero este no es el sentido de esta propuesta, sino de taponamiento de esta creciente hemorragia pensional que arriesga con desangrar el fisco en un futuro inmediato”.

Según explicó Olivera, la empresa se financia en su mayor porcentaje con el Presupuesto General de la Nación, pero una parte viene del recaudo de los afiliados, y otra proviene de los traslados de fondos privados.

“Anif dice que es necesario cerrar Colpensiones por problemas financieros, pero esa situación sería más perjudicial que benéfica para el país. El principal problema del sistema pensional colombiano, es la baja cobertura y la población vulnerable”, explicó.