Norte de Santander se destaca a nivel nacional por sus cafés especiales, que tienen un sabor achocolatado, por lo que esta producción sigue creciendo en el departamento.
Por eso, en Labateca el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), a través del Centro de formación para el Desarrollo Rural y Minero (Cedrum), realizó la primera edición del concurso regional de cafés especiales.
Aproximadamente 300 caficultores de Labateca, Toledo, Chitagá y Herrán participaron de la jornada en la que los expertos del Cedrum pudieron identificar las características físicas de los cafés especiales de la zona.
Óscar Barroso, instructor de Agrosena, resaltó que analizaron el aroma, el sabor, la acidez y el cuerpo de los granos.
Los expertos recogieron 87 muestras de los caficultores, de las cuales las 10 mejores fueron premiadas y enviadas a la Escuela Nacional para la Calidad del Café del Sena en Quindío (Armenia).
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“La idea es identificar las variedades de cafés especiales para darles unos puntajes, de acuerdo a la calificación de la Asociación de Cafés Especiales (SCA), que va de 1 a 100”, explicó Barroso.
Barroso destacó que las variedades participantes en el concurso tuvieron un puntaje promedio de 82 puntos. Según la calificación de la SCA, cuando el café supera los 80 puntos, es considerado especial.
El Sena y la Gobernación están trabajando un proyecto para fortalecer la cadena productiva de cafés especiales en Toledo, Labateca y Chitagá.
“En la región tenemos cafés especiales con una calidad similar a la que se produce en el Huila, Tolima, Cauca y el Eje Cafetero, y al seguir mejorando los procesos vamos a mejorar en los puntajes”, indicó Barroso.
Vale la pena destacar, que según el Comité Departamental de Cafeteros, en 36 de los 40 municipios de la región se cultiva el grano, y la gran apuesta es la producción de cafés especiales con denominación de origen.
