Desde el cierre de frontera con Venezuela, el mercado de autopartes pasa por un mal momento; luego de perder su mayor socio comercial, los comerciantes del sector trabajan día a día para subsistir y no tener que cerrar sus negocios.

Según datos de la Asociación del Sector Automotriz y Sus Partes (Asopartes), en Cúcuta, el mercado se redujo un 49,3 %, de 158 millones vendidos en 2014 a 80 millones de dólares en 2018.

David Alberto Reyes, empresario del sector y vocero de Asopartes en el departamento, dijo que los comerciantes de repuestos no dan abasto con la poca demanda del mercado interno.

“Pasamos de atender a todo un país a un mercado regional, eso hace que las ventas actuales sean solo de supervivencia”, explicó.

Este mercado sigue afectado por el contrabando de piezas y partes usadas que son llevadas hacia Venezuela.

Tulio Zuloaga, presidente ejecutivo de Asopartes, dijo que el mercado de partes usadas es fruto del hurto de vehículos deshuesados en el mercado negro.

“Partes de vehículos usados en Estados Unidos entran por Venezuela, donde no se tiene ningún control, algunas se quedan en ese país y otras entran a Colombia”, indicó.

El año pasado, los comercializadores afiliados a Asopartes Cúcuta se reunieron con empresarios del transporte público del estado Táchira, para crear una relación comercial que permitiera retomar la exportación hacia. 

Sin embargo, la reunión no fue fructífera. “Estamos esperando que se normalice la situación en Venezuela, ese es uno de los mercados hacia donde Colombia exporta desde hace muchos años”, agregó Zuloaga.

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A nivel nacional

El líder gremial resaltó que en el segundo semestre del año pasado hubo un repunte en las ventas, después de un primer semestre complejo.

Las ventas en 2018 a nivel nacional cerraron en 3.900 millones de dólares, 6 % más que en 2017, equivalente a 234 millones de dólares.