Mientras en la mayoría de estados de Venezuela manda el dólar ante el evidente deterioro del valor del bolívar, en Táchira se impone el uso del peso como moneda de cambio.

Incluso, el valor del dólar en este estado, difiere del precio al que se comercializa la divisa en el resto del territorio venezolano.

Ante esta dinámica, el peso se ha abierto paso en la cotidianidad de sus ciudadanos, quienes usan la moneda colombiana para el pago de servicios y la compra de rubros básicos.

Aldo Contreras, economista y experto conocedor del mercado fronterizo, explica que la economía de Táchira se ha “colombianizado”, pues si bien es cierto que ante la pulverización del bolívar, muchas transacciones se hacen en dólares, el peso ha ganado terreno.

“Encontramos municipios cuya economía está 90 % colombianizada, como  Rubio y García de Hevia”, explicó. 

Según el experto, esta “colombianización” es sólo aplicable en el estado Táchira, pues en el resto de Venezuela “impera una dolarización de facto, en vista de la hiperinflación venezolana que el año pasado alcanzó 1’700.000 %”.

Agrega que también las remesas –estimadas en unos 4.000 millones de dólares– enviadas por los venezolanos que han salido del país, han contribuido notablemente al proceso de dolarización.

Una prueba de ello es que su capital, Caracas, registra más de 57 % de sus operaciones en dólares. Zulia más del 60%,  mientras que otros estados evidencian niveles de dolarización de un 30 % en promedio.

Contreras agregó que, en el caso del dólar, existen diferentes marcadores que inciden en su precio; está el dólar oficial que maneja el Banco Central de Venezuela y que el martes cerró en 13.600 bolívares por dólar.

Por otra parte, están las páginas que calculaban  a la fecha el valor de la divisa en el mercado paralelo  en 14.000 bolívares por dólar, mientras que en Cúcuta, dos de las principales casas de cambio marcan su precio de transacción en 15.000 bolívares por dólar, impulsadas –en parte– por la depreciación que ha sufrido recientemente el peso.