Hay varios indicadores para medir el beneficio e impacto de los proyectos que se plantean para las ciudades, como es el caso de ‘Corazones de barrio’ anunciado por la Alcaldía de Cúcuta y que empezarán a construirse próximamente, con una inversión total de $15.600 millones.
Con estas obras para la descentralización se espera un impacto favorable sobre 126.061 personas que habitan en sectores de las comunas 3, 4, 7 y 8, como por ejemplo que muchas de ellas no tengan que desplazarse hasta el centro de la ciudad a hacer determinadas diligencias.
Un aspecto práctico que esto acarrea, es que los habitantes de las ciudadelas Juan Atalaya o La Libertad no deberán gastar más dinero en pasajes y quienes tienen carro o moto al evitar irse hasta la Alcaldía o determinados despachos, ayudarán a la movilidad y también ahorrarán combustible.
Que en los entornos habitacionales se logre contar con áreas donde la gente pueda llegar a hacer gestiones ante entidades municipales o nacionales, exponer reclamos, hacer pagos, pero también tener oportunidad de acceder a formación sin ir muy lejos de casa, constituye un importante valor agregado para una ciudad incluyente en la que el ciudadano siempre esté en la primera línea de atención.
El ahorro de tiempo, el mejoramiento en la atención al ciudadano y una cercanía de la administración municipal con sus gobernados son otros de los resultados favorables que se producen con ese tipo de centros multipropósito en estos sectores alejados del corazón de la ciudad, pero al que por obligación deben ir, porque el Estado, desde el punto de vista de sus instituciones, está muy alejado de ellos, para incluso recibirles hasta sus impuestos.
Hay algo que también llama la atención en este proyecto, como es el de la instalación de cajeros automáticos, porque recordemos que ese servicio tan importante, tampoco está muy a la mano de las personas que los requieren y prácticamente la mayoría termina es yendo por obligación al centro.
Este anuncio hecho por al alcalde Jairo Yáñez y que nació del Centro de Pensamiento del Área Metropolitana de Cúcuta y la alcaldía, que serán los responsables de sacarlo adelante, es una forma de comenzar a enfrentar la injusticia social.
Porque dentro de las formas que alimentan a este mal se encuentra que por ejemplo una comunidad no pueda hacer contacto rápido con la Alcaldía, por ejemplo, porque para hacerlo deben de sacar de su exiguo presupuesto familiar para el transporte, las fotocopias y y otros gastos para hacer los trámites que requieren.
Por lo que se vio en los render, las tres instalaciones llamadas ‘Corazones de barrio’ se ven muy llamativas, funcionales y mejoradoras del entorno urbanístico para apoyar al rescate de la dignidad del tejido social y al mejoramiento de la calidad de vida de los vecinos de las cinco comunas.
Luego de que se materialice esta idea, es fundamental impedir que se esfumen con el transcurso del tiempo, y que en los despachos que allí se habiliten, sean las personas de cada una de las comunas las que tengan la primera opción de empleo y que los demás trabajos relacionados con mantenimiento y celadurías, entre otros, también se contraten con la comunidad, para que así se logre una mayor empatía y no se vea al proyecto como una simple mole, que no deja nada al sector.
