Diciembre es una época propicia para descansar, olvidar los problemas cotidianos y dedicarse al goce y el disfrute de estas fiestas. 

Con su traje de luces que estrena por estos días, Cúcuta se ha convertido en una ciudad de mil colores, ideal para disfrutar a plenitud las fiestas decembrinas y deleitar la mirada con los distintos escenarios que ofrece con alumbrado navideño.

Varias entidades han aportado su granito de arena para hacer de los parques, las plazas y las calles, escenarios llenos de luces que día a día se han ido convirtiendo en un atractivo para todos los cucuteños. 

La empresa Centrales Eléctricas – EPM, la alcaldía, la Gobernación y Corponor, entre otras, han aportado para el embellecimiento de la ciudad en época decembrina, además de los particulares que tienen por costumbre iluminar sus casas o negocios, lo cual indudablemente también contribuye a que en varios sitios céntricos y en barrios, el espíritu de la navidad esté presente. 

Ya es común encontrar en las noches, algunos lugares repletos de vehículos y transeúntes que llegan a apreciar los alumbrados más atractivos.

El parque del Agua y el de los ingenieros, cuya iluminación ha estado a cargo de Cens EPM y la recuperación paisajística de este último a cargo de Corponor, son dos de los lugares que concentran hoy la mayoría de las miradas. En el parque de los ingenieros, un enorme árbol que cuenta cuentos a niños y adultos suele congregar centenares de visitantes, se ha convertido en uno de los mayores atractivos por estos días.   

Pero también los íconos arquitectónicos de la ciudad se han renovado con una iluminación que nada tiene que envidiarle a las más grandes ciudades de Colombia. La catedral, la biblioteca pública, el parque Santander, el parque Simón Bolívar, la redoma de Pinar del Río, entre otros, le han cambiado por completo la cara a la ciudad. Inmensos árboles de colores, que engalanan las avenidas principales han transformado la cotidianidad de la ciudad, poniendo un toque especial de originalidad y júbilo a las noches cucuteñas, como no ocurría hace muchos años. 

También hacen parte de este agradable exhibición, algunos municipios de Norte de Santander. Cinco de ellos (Salazar de las Palmas, La Playa de Belén, Sardinata, Labateca y Lourdes) cuentan hoy con un colorido espectáculo de luces gracias al un concurso organizado por Cens, empresa que con más de mil millones de pesos, financió la iluminación propuesta por las mismas comunidades de estas zonas. 

La alcaldía, por su parte, invirtió 1.200 millones de pesos. 

Una ciudad que genere movimiento, renovación y admiración, así sea solo por un mes del año, es un orgullo para todos sus ciudadanos, especialmente para aquellos que no residen aquí y que por estos días llegan para pasar en familia las festividades de Navidad y fin de año. A todos ellos, Cúcuta los recibe hoy con su mejor cara. 

Ojalá el estándar de este año se mantenga para los venideros y los cucuteños podamos seguir gozando de un alumbrado de primera, que se convierte en un motor para el disfrute de todos los ciudadanos y por qué no, para quienes nos visitan por una u otra razón.