La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile

Dengue y COVID-19

El Instituto Departamental de Salud precisó el desarrollo de acciones en Norte de Santander.

Ahora que Norte de Santander registra temporadas lluviosas parecidas a Bogotá o Chocó, donde a cualquier hora se registran fuertes y prolongados aguaceros, la ciudadanía necesita ser protegida contra factores que tienen en ese tipo de clima su mejor ambiente para desatarse.

Por un lado están las enfermedades respiratorias agudas, tanto virales como bacterianas y el mismo coronavirus que ahora en el mundo ha tenido más mutaciones como la del ‘perro del infierno’ que tiene preocupada a la comunidad científica.

La inquietud se centra en que este sublinaje podría traer un mayor riesgo de reinfección, razón por la cual la Organización Mundial de la Salud ha abierto la posibilidad de profundizar en las investigaciones.

En una región como la nuestra podría resultar siendo de la mayor gravedad que en medio de la atípica oleada de aguaceros entrarán en acción al mismo tiempo enfermedades como el dengue, el zika, el chikunguña, la COVID-19 y otras infecciones respiratorias agudas.

Eso equivaldría a un cóctel altamente peligroso para la salubridad de miles de habitantes y, por lo tanto, en Cúcuta es necesario que las autoridades de salud dispongan todas las acciones   necesarias para combatir el zancudo transmisor de tres de esos males.

Y esto no puede tomarse a la ligera porque hace un mes, hasta finales de octubre, según el Instituto Nacional de Salud en Colombia se habían reportado 186 muertes probables por dengue, mientras que la capital de Norte de Santander totalizó 1.301 casos a mediados de noviembre.

De ese total, 15 correspondían a dengue grave, 901 con signos de alarma y 385 sin signos de alarma. Recordemos que esta situación sanitaria debe tratarse con la mayor rigurosidad, teniendo en cuenta que los zancudos lo transmiten luego de picar a los pacientes enfermos.

Si eso es así, hasta el momento, más allá de los llamados a la comunidad de tapar tanques de agua limpia y evitar reservorios para la crianza de mosquitos en recipientes, no se han visto trabajos de campo contra dichos vectores, ya sea mediante la fumigación, por ejemplo.

Es urgente que tanto en Cúcuta como en Villa del Rosario con cuatro casos graves y 122 con signos de alarma, Ocaña, con tres casos graves y 69 con signos de alarma, así como Puerto Santander, Tibú, El Zulia, El Tarra, Sardinata y Salazar de Las Palmas se blinden contra esta enfermedad que es muy propia de estas tierras, pero que idealmente debe ser contenida por razones obvias.

En ese sentido el Instituto Departamental de Salud precisó el desarrollo de acciones en Norte de Santander para la capacitación, promoción y prevención a la comunidad, jornadas de recolección de inservibles en municipios, acciones de control de reservorios y fumigación

Esta combinación de ataques contra la salud pública es urgente combatirla y hacerla parte de la emergencia generada por el invierno para que el Ministerio de Salud venga a darnos más apoyo en los frentes epidemiológico y de recursos económicos e insumos, si tenemos en cuenta que el ambiente generado por la oleada lluviosa golpea con fuerza la salud, en especial de poblaciones vulnerables, así como de los niños y ancianos.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion

Image
La opinión
La Opinión
Viernes, 2 de Diciembre de 2022
Premium-home
Patrocinado por:
Logo Empresas
Temas del Día