Cayó más bajo de lo esperado, al nivel de los chantajistas barriobajeros, que amenazan a su propia madre con contar sus secretos si no hacen lo que ellos dicen, solo que quien así actúa se llama Donald Trump y es presidente de Estados Unidos.
Con el Partido Demócrata dueño de la Cámara de Representantes, a Trump, la vida se le convierte en un camino cubierto de piedras que él tendrá que recorrer descalzo. Y él lo sabe tan bien, que en la primera reacción ante el avance demócrata llegó al borde de donde termina la legalidad.
Si la Cámara de Representantes, que ganaron los demócratas, investiga los antecedentes financieros de Trump y sus impuestos, y sus relaciones poco claras con los rusos para las pasadas elecciones presidenciales, el presidente anunció que adoptará una ‘postura de guerra’ y que los republicanos del Senado investigarán a los demócratas. En términos universales, eso se llama chantaje.
“Pueden jugar ese juego, pero podemos jugar mejor, porque tenemos una cosa llamada Senado de Estados Unidos y se hicieron muchas cosas cuestionables entre filtraciones de información clasificada y muchos otros elementos que no deberían haber ocurrido”, señaló Trump al recordar episodios recientes de su vida reciente en los que quedó en evidencia.
El volumen de negocios en la Cámara presagia un cambio dramático en la presidencia de Trump. Una Cámara demócrata puede bloquear las prioridades del presidente, como la de construir un muro a lo largo de la frontera con México, y usar el poder de citación para investigar asuntos de los que estuvo bien protegido.
Trump comenzó congratulándose con lo que consideró ‘triunfo republicano’ en las elecciones del martes, pero casi de inmediato desató su furia, amenazando a la Cámara de Representantes. “Si los demócratas piensan que van a desperdiciar el dinero de los contribuyentes investigándonos, entonces también nos veremos obligados a considerar la posibilidad de investigarlos por todas las filtraciones de información clasificada, y mucho más, en el Senado… Dos pueden jugar ese juego”, dijo en su cuenta de Twitter.
La verdad es que la pérdida de la Cámara es un muy duro golpe para el presidente, cuyo partido controlaba todas las palancas de poder en Washington y aun así tenía problemas para pasar sus prioridades legislativas más importantes además de los recortes de impuestos. A partir de ayer, todo es muy diferente…
Por lo pronto, el representante demócrata de California Eric Swalwell, a su vez miembro del Comité de Inteligencia de la Cámara, dijo que hay que completar los vacíos en las investigaciones sobre Rusia, y que “el pueblo estadounidense verá sus declaraciones de impuestos (de Trump), no por ningún interés voyerista, sino porque debe saber si es corrupto”.
Los líderes demócratas se han resistido a la idea del juicio político a Trump, pero podrían verse sometidos a una enorme presión por parte de la base liberal del partido, en especial si los investigadores del presidente producen un informe con información condenatoria.
”El pueblo ha votado a favor de un cambio real, y es fundamental que estos nuevos representantes reconozcan que esto solo vendrá con un verdadero recuento político por la corrupción, el auto-trato y la ilegalidad ejemplificada por Trump”, dijo Tom Steyer, un multimillonario liberal de California que ha entregado fondos para impulsar el juicio político. “No se le puede permitir que continúe violando la ley con impunidad”.
