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Viruela del mono

Una primera consideración que deben tener en cuenta el  Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Salud es que la región.

Así como el coronavirus nos llegó de Europa, ahora la viruela del mono fue traída a Norte de Santander desde Norteamérica, encontrándonos en medio de ambas enfermedades, porque la primera no se ha ido y la segunda está recién llegada.

Una primera consideración que deben tener en cuenta el  Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Salud es que la región por sus rasgos especiales debe tener un tratamiento extraordinario también.

No más el hecho del paso pendular diario de miles de personas por los puentes internacionales además de tener aquí a una alta proporción de migrantes, ya de por sí indica la necesidad de un plan especial.

Es decir, que por ejemplo se habilite, al menos, un laboratorio para hacer las pruebas PCR en casos sospechosos de viruela símica para obtener los resultados inmediatos.

No puede seguir ese pasaje que estamos viviendo, y que es típico del pasado en que dependíamos del centralismo, de tomar una prueba y enviarla a examen a Bogotá y esperar hasta que el laboratorio del INS devuelva el resultado.

Ni siquiera es a Bucaramanga. Es hasta la capital del país, asunto que es urgente que sea revisado y la región pueda hacer todo el proceso, a fin de evitar sorpresas.

El pedido para que aquí se habilite el laboratorio del Instituto Departamental de Salud, encaja perfectamente dentro de esta directriz del ministerio, de  estar en una vigilancia permanente para evitar que se nos rompa y perdamos esas cadenas y caigamos en una transmisión comunitaria.

Para que eso no ocurra, el ministerio podría suministrarle al departamento los insumos y reactivos necesarios para que ese control del que se habla siga siendo efectivo.

Pero además recordemos que la población debe poner de su parte con los cuidados de bioseguridad, que  son indispensables mantenerlos porque este mal puede transmitirse entre otras, cuando una persona infectada toca cualquier superficie o prendas de vestir, sillas, aparatos eléctricos, entre otros.

Entonces, al venir de una pandemia que aún persiste, la recomendación del lavado constante de manos hay que seguirla acatando para la protección frente a las dos enfermedades.

Y lo mismo debe ocurrir con el tapabocas que es obligatorio en espacios cerrados y en el transporte público porque de esa viruela también es probable contagiarse al respirar escamas de la piel o virus de la ropa.

Es decir, para poder mantener nuestras actividades educativas, laborales, profesionales y de la vida diaria sin otra interrupción abrupta como la del encierro del coronavirus, lo mejor es continuar con el cuidado que se estableció en la nueva realidad.

Para tener una idea sobre el nuevo mal, hasta el momento en Colombia se registran 164 casos confirmados en estas regiones: Bogotá, Antioquia, Tolima, Risaralda, Cali, Cartagena, Cauca, Cundinamarca, La Guajira, Santander, Valle del Cauca, Quindío, Norte de Santander, Barranquilla y Malambo en Atlántico.

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Lunes, 22 de Agosto de 2022
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