Basada en los comics de Marvel de Chris Claremont (The Uncanny X-Men) y Bill Sienkiewicz (Elektra: Assassin), el próximo jueves el canal FX estrenará a las 10:00 de la noche la serie ‘Legion’.

Se trata de la historia de David Haller (Dan Stevens), un joven diagnosticado como esquizofrénico desde niño, que luego de conocer a la mujer de sus sueños descubre que no está tan perturbado como siempre pensó, sino que por el contrario, es un poderoso mutante.

Compuesta por ocho episodios de una hora, es producida por FX Productions y Marvel Television y FXP, bajo la producción de Lauren Shuler Donner, quien ha realizado películas que han recaudado en el mundo más de 4500 millones de dólares, en especial con la extensa saga de X-Men.

- ¿Cómo ve el desarrollo del género de superhéroes?

Cuando nos interesó por primera vez hacer la serie de X-Men, un periodista me llamó y dijo: ‘¿Por qué estás haciendo esto?’, porque desde ‘Superman’, que mi esposo, Richard Donner, dirigió en los años setenta, no se había logrado un real impacto.

Pero luego de hacer las primeras, empezaron a salir un montón de películas de cómic no muy buenas.

- ¿Qué le atrajo de X-Men?

No crecí leyendo a los X-Men, pero cuando los leí, vi personajes muy complejos, muy defectuosos, trágicos héroes, especialmente alguien como Logan. Sentí que allí había un carácter real que podríamos relacionarnos y podríamos continuar sus viajes.

- ¿Cómo nació la idea de hacer 'Legion'?

Después de hacer tantas películas de X-Men pensé que sería genial usar a algunos de los otros personajes que no están en nuestro universo cinematográfico y expandirlo a la televisión.

Hay 45 años de cómics de X-Men, podemos sacar algunos de estos otros personajes, con total libertad.

- ¿Qué mensaje tiene este tipo de serie?

No puedes hacer un trabajo de X-Men sin enviar ese mensaje, que somos forasteros, que somos desajustados, que somos malentendidos y que no somos tratados en la sociedad.

En primer lugar, todo el mundo se siente de esa manera, incluso si no lo son. Es el viaje de David, protagonista de ‘Legion’, él ha sido rechazado y hasta comprometido, pensando que es esquizofrénico, pero siempre está la pregunta latente: ¿es esquizofrénico o tiene poderes?

Así que, debido a sus poderes, le han dicho que está loco. Estoy seguro que a mucha gente, cuando actúan de manera diferente, se les dice que están locos.

- ¿Esta serie se unirá al universo X-Men?

Eso va a ser un misterio. La franquicia de la película continuará y podemos unir los brazos de vez en cuando, pero ya veremos.

- ¿Por qué usar la psiquiatría como telón de fondo para este programa?

David es un esquizofrénico que oye voces, y las voces son sus poderes. Así es como está en los comics de X-Men, y él ha sido confiado a un hospital psiquiátrico.

- ¿Cuál es la diferencia entre la narración en televisión y cine para este tipo de temas?

Me atrae la televisión, porque tienes que concentrarte en los personajes. Cuando hacemos nuestras películas, lo más importante siempre son las apuestas emocionales. Ya sabes, acción es acción, pero si no te importa quién está haciendo la acción y si sobrevivirán, ¿a quién le importa? Así que siempre se trata de apuestas emocionales.

Necesitamos más acción, más espectáculo, más efectos visuales cuando estamos haciendo películas, porque es por eso que estás pagando tu dinero. En la televisión, podemos centrarnos en los personajes, podemos conocer a estas personas, podemos verlas todas las semanas, así que por eso.

- ¿Cuál es el estado actual del género de superhéroes en el cine?

Los estudios están siendo muy cautelosos, y ahora más porque son propiedad de corporaciones, que buscan las franquicias de superhéroes para captar la mayor cantidad de dinero.

Los dramas, en ese sentido, son más difíciles, por eso, salen mejor en la televisión que en el cine, a menos que no sea cintas de estudios de corporaciones, sino del campo independiente.

- ¿Cuáles son los elementos claves para construir una franquicia de éxito?

Siempre asegúrese de que sus apuestas emocionales sean claras y presentes, sin importar lo que esté haciendo. Siempre reinventarse y no dejarla envejecer, que cada cinta tenga su propia identidad.