Acabaron en la ruina o se declararon en bancarrota.
Hay famosos que no pudieron hacer frente a sus deudas y acabaron en la ruina o se declararon en bancarrota. Eso sí, muchos solo se encontraron en esta situación temporalmente y pudieron solventar su situación.
Chris Tucker
Debió enfrentarse a Hacienda, con la que había contraído una deuda de doce millones de dólares, antes de tener un pequeño papel en la película ‘El lado bueno de las cosas’. Participó en la película estadounidense Billy Lynn’s Long Halftime Walk en el 2016.
Pamela Anderson
En 2009 se dio a conocer que estaba endeudada hasta las cejas por deber más de 700.000 euros a varias empresas constructoras en concepto de reformas de su casa de Malibú cuando solo tenía 2.700 euros en su cuenta.
A finales de 2009 saltó la noticia de que estaba arruinado o muy cerca de estarlo. Sin dinero en su cuenta corriente, tuvo que vender o incluso subastar algunas de sus mansiones, que tenía esparcidas por medio mundo: Las Vegas, Alemania, Inglaterra, Nueva Orleans, Beverly Hills… Gran amante de los cómics, el sobrino de Francis Ford Coppola tuvo que vender hasta el primer número en donde aparecía Superman. En 2015, Hacienda le reclamó seis millones de euros…
Gary Coleman
En 1999 se hizo público que estaba en bancarrota y atribuyó sus problemas financieros a la mala gestión de sus fondos. Puso a la venta su coche en Internet y sus autógrafos. Falleció en 2010.
Michael Jackson
En 2007, Jackson debía 27 millones de dólares (18 millones de euros) por su rancho de Neverland. Además, llegó al punto de pagar 30 millones de dólares al año en intereses de los cerca de 500 millones de dólares que acumuló en deudas durante los años previos a su muerte en 2008.
