Renunció a la carrera de  ingeniería ambiental para dedicarse de lleno a la música. Antes cantaba por cantar, pero ahora la convirtió en su profesión.

El cucuteño Adrián Fernando Peñaranda adoptó el Chantré para darse a conocer como solista de  bachata desde hace año y medio.

Su recorrido artístico se remonta a la primaria y a la secundaria, a los actos culturales  del liceo Simón Bolívar y colegio General Santander en Villa del Rosario. Participaba en cuanto concurso se organizaba y fue así como  se inscribió en ‘Buscando una estrella’ en donde ocupó el segundo lugar. Subía a las tarimas de las ferias microempresariales que organizaba su padre Víctor y siempre bajaba premiado. En el Instituto de Cultura y Bellas Artes aprendió a tocar guitarra. Pero fue en la Universidad de Pamplona donde formalizó sus estudios de música y en el 2007 se graduó con todos los honores. Allá tuvo la oportunidad de integrar la orquesta ‘Big band Oriol Rangel’ durante 5 años. También perteneció al grupo Neuma, cuyo baterista e ingeniero de sonido, Elkin Mogollón le grabó su primera producción: ‘No entiendo bien la realidad’. 

En Pamplona conoció a la que hoy es su esposa: Olga Camargo, con quien tiene dos hijos, de 11 y 5 años  y  está involucrada con el folclor caribeño. Allí incursionó como compositor, sobre la vida cotidiana.

Las puertas se le fueron  abriendo y agrupaciones como los Dodger de Colombia, la de la Policía, Bahía y la de Miguel Molli de Venezuela, lo invitaban a tarima. Allí se codeó con Diomedes Díaz. Gilberto Santa Rosa, Wilfrido Vargas, entre otros, pero nunca hizo alarde de eso. “No era farandulero con las redes, pero todo eso hace falta”.

También concursó en ‘A otro nivel’, en el 2016, pero aún estaba tímido con el uso de las redes sociales y solo pasó el primer filtro por no tener, en ese entonces, su género definido. Se presentó como músico versátil.

Adrián Chantré grabó  después dos sencillos: ‘Buscando palabras’ y hace cuatro meses ‘Te quiero mía’. El video lo está ‘rodando’ en interiores en la Villa Histórica. 

En esa búsqueda de aportar sus conocimientos se vinculó con la Fundación Batuta en donde es coordinador y dicta clases en el barrio Nuevo Horizonte desde hace una década, porque cree en el poder transformador de la música. Por esa específica labor, la Cámara Junior Internacional Cúcuta lo exaltó como joven sobresaliente en la categoría de ‘Logros culturales’.

Este año seguirá cantando en restaurantes de Cúcuta y promocionando en la radio, en las redes sociales y prensa en general su último sencillo a ritmo de bachata. Su camino no ha sido facil, le ha tocado renunciar a todas las orquestas para ser solista. Sigue en la línea de compositor. Al grupo émulo ‘Rikarena’ le compuso ‘Guepa, guepa’ para el Carnaval de Barranquilla.

Su música está sonando en  Núremberg, Alemania, donde se hace el concurso ‘Bachateando’ y  se  prepara para competir, en junio,  en el Festival de Bachata, que lo organiza precisamente otro cucuteño: Fernando Sánchez Gamboa. En el canal YouTube se puede admirar a los alemanes bailando a ritmo de ‘Tequiero mía’