En horas de la noche de este jueves se conoció de forma extraoficial el hallazgo de tres nuevas fosas comunes en jurisdicción del municipio Pedro María Ureña del estado Táchira.
Se presume que podrían ser tres los cuerpos encontrados por las autoridades venezolanas, en igual número de fosas, las cuales fueron localizadas en el sector Villa Juliana, aldea La Mulata, cercano a donde en el mes de mayo fueron encontrados también 13 cadáveres sepultados en fosas de tierra de poca profundidad.
El hallazgo se vincula a la captura, por parte de autoridades del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) de dos presuntos paramilitares, integrantes de la banda ‘Los Urabeños’, quienes fueron identificados como Oswaldo Cárdenas, apodado ‘Carro Loco’ y Humberto Guzmán Ramírez, llamado ‘Beto’, de nacionalidad colombiana. Éste último habría sido designado por ‘Car’e Niña’ para asumir el control de las actividades de la organización en Ureña.
Los detenidos habrían confesado la existencia de dos fosas, por lo que los funcionarios del Sebin coordinaron la búsqueda en la que encontraron las fosas en donde hallaron los cadáveres, presuntamente descuartizados, y restos de ropa. Las sepulturas estaban separadas unos 500 metros, comentaron fuentes presentes en la zona.
Familiares a la expectativa
Al igual que en el caso de las 13 osamentas anteriores, la data de muerte se estima en aproximadamente un año, y las autoridades continúan rastreando la zona, por lo que no se descarta que se produzcan nuevos hallazgos en las próximas horas.
Es por esta razón, que al conocerse del hallazgo, las familias comenzaron a solicitar información sobre la identidad de las víctimas. De las 13 osamentas anteriores sólo pudieron ser identificados 3 cuerpos, aunque las autoridades recabaron material genético y fotográfico de las familias de más de 50 jóvenes desaparecidos en la zona, por lo que cuentan con una amplia base de comparación para intentar establecer la identidad de las osamentas encontradas el jueves.
Carmen Luna, madre de Jesús Alberto Vera Luna, desaparecido en Ureña el 22 de diciembre del 2008, comentó que las familias no pierden la esperanza. “Es una angustia muy grande, y ya uno lo que quiere es saber qué pasó con su muchacho”.
Manifestó que a su hijo se lo llevaron a la puerta cuando llegaba a su casa, “fueron tres hombres, lo golpearon en la nuca y se lo llevaron en la maleta de un carro, una vecina los vio y nos contó lo que había pasado, inmediatamente empezamos a buscarlo, pusimos la denuncia de su desaparición ante las autoridades, pero hasta ahora no tenemos ninguna noticia sobre su paradero”.
Aseguran que hasta el momento no han recibido ninguna comunicación, ni citación por parte de las autoridades, por lo que permanecen a la expectativa y se han organizado para que algunos acudan a la morgue en busca de información.
Los restos encontrados este jueves en La Mulata, fueron trasladados al Instituto de Ciencias Forenses de la ciudad de San Cristóbal, para proceder a los estudios que lleven a su identificación definitiva, mediante exámenes antropológicos y pruebas de ADN.
