Luego de tres meses, cerca de 1.580 alumnos que residen en Venezuela y estudian en el país obtendrán el beneficio.
Los estudiantes venezolanos de ocho instituciones educativas en Villa del Rosario podrán empezar a utilizar el servicio de transporte escolar. Luego de esperar tres meses cerca de 1.580 alumnos que residen en Venezuela y estudian en el país obtendrán el beneficio.
Ahora el dilema se trata de la petición hecha por la secretaria de Educación departamental, Myriam Ortega Quintero, quien supervisará desde hoy la reactivación del servicio, y señaló que espera que las autoridades del vecino país permitan el ingreso de los autobuses hasta la glorieta de la aduana en San Antonio, estado Táchira, ubicada a unos escasos 100 metros de la línea fronteriza que divide a ambos países.
Desde el cierre de la frontera en agosto de 2015 el servicio de transporte viene funcionando así; sin embargo, tras el cierre total el 23 de febrero el gobierno venezolano atravesó unos contenedores con arena en pleno puente Simón Bolívar.
Sin embargo, esta posibilidad es complicada toda vez que el servicio de transporte escolar en Cúcuta, por el puente Francisco de Paula Santander, fue reactivado hace semanas atrás y no ha podido ingresar a suelo venezolano.
Los niños deben pasar el puente caminando y los autobuses esperan en la redoma de El Escobal, donde los estudiantes suben al vehículo y son llevados a los diferentes colegios de la ciudad.
Rutas
La secretaria Myriam Ortega Quintero explicó que una vez surtido el proceso de contratación en el que se establecieron 20 rutas, 12 en la mañana y 8 en la tarde, estrategia que es financiada por el Ministerio de Educación Nacional con 1.267 millones de pesos.
La contratación llega hasta finalizar el calendario escolar, y fue adjudicado al único oferente que participó: Calidad Total SAS, representado legalmente por Martha Castellanos Díaz.
Los padres esperaban con ansias el servicio, porque a los niños les tocaba caminar trayectos muy largos por las deficiencias del servicio de transporte en San Antonio.
