El Real Madrid ganó en su visita al Inter de Milán con un gol del brasileño Rodrygo (89), este miércoles en la primera jornada de la Liga de Campeones, en un duelo en el que el equipo blanco sufrió durante muchos minutos y en el que sobrevivió gracias a su arquero Thibaut Courtois.

Con su triunfo, el gigante blanco se sitúa al frente del grupo D junto al Sheriff Tiraspol, debutante y teórica 'Cenicienta' de la llave, que en el primer turno de partidos venció 2-0 al Shakhtar Donetsk.

Camavinga, providencial 

En un duelo en el que el Inter fue muy superior en la primera parte, el Real Madrid mejoró en la segunda y en el último suspiro apareció Rodrygo para rematar de primeras un pase en el área del centrocampista francés de 18 años Eduardo Camavinga, el último fichaje blanco, que había entrado en el campo 9 minutos antes.

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"Merecimos mucho más, pero si no marcas es difícil ganar. Hicimos un gran partido contra un gran adversario. Courtois ha estado muy bien, pero no podemos perder un partido así", señaló el delantero del Inter Edin Dzeko.

Lejos de la versión sólida que el Real Madrid había mostrado en España, su bautizo en la nueva Champions estuvo marcado por las dudas, a expensas de un Inter que multiplicó las ocasiones de gol, especialmente en la primera parte.

Ante el equipo de su infancia, en el estadio en el que triunfó como jugador y entrenador con el Milan, Carlo Ancelotti regresaba a la Champions con el Real Madrid. La última vez que se había sentado en su banquillo fue en la final de Lisboa-2014, cuando llevó al gigante blanco a su histórica décima copa.

Desde entonces cayeron tres más (2016-2017-2018), siempre con Sergio Ramos levantando el trofeo como capitán.

Con el histórico 4 iniciando una nueva vida en París, la cita en el Giuseppe Meazza era el momento para que otros jugadores fueran tomando el testigo de su liderazgo.

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El brazalete lo lució Karim Benzema, cinco goles en cuatro partidos en España, muy aislado en ataque este miércoles. Tampoco Casemiro, lejos de su mejor forma, ni Luka Modric eran capaces de enchufar al equipo blanco.

La primera parte fue un suplicio para los jugadores de Ancelotti. Con las bajas de Marcelo y Ferland Mendy, fue Nacho el que ocupó el lateral izquierdo, con David Alaba en el centro de la zaga junto a Militao, y Dani Carvajal en la derecha.

"Me gustó el partido porque había que sufrir y sufrimos siendo compactos. Eso me ha gustado, saber sufrir y demostrar que este equipo tiene sacrificio", declaró Ancelotti.

Falta de eficacia

Courtois comenzó su recital con un pie ante Dzeko (8) y luego atajó un remate de cabeza de Lautaro Martínez (19) en una contra que había lanzado a toda velocidad el propio delantero argentino.

En los últimos minutos de la primera parte el Inter incrementó la frecuencia de sus llegadas (14 disparos) aunque le faltó puntería, mientras que el Real Madrid se fue al vestuario sin rematar entre los tres palos.

Su única ocasión clara llegó en el 36, cuando Militao remató de cabeza desde el primer palo un córner lanzado por Modric y el balón se fue cerca de uno de los postes.

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El Inter sumó un par de buenas ocasiones más, como en el remate del eslovaco Milan Skriniar que salvó Courtois con una gran estirada (53) o en un manotazo tras un eslalon de Denzel Dumfries (68).

Pero el Real Madrid había dado un paso adelante tras pasar por el vestuario, más intenso y dinámico en la circulación. Su primer tiro entre los tres palos fue de Lucas Vázquez (56). 

Luego Vinicius hizo ruido con un par de aventuras y su compatriota Rodrygo marcó para lograr tres puntos de oro.