Dominador y seguro de su superioridad, el Manchester City reforzó su liderato de la Premier League, ayer, al derrotar al Chelsea (1-0).
La carrera por el título parece cada vez más resuelta, aunque el Liverpool, quién permanece tercero a 14 puntos del Manchester, cuenta con dos partidos menos y recibirá al Brentford mañana.
Pero más allá de la diferencia de puntos, es lo visto en el Etihad, con el segundo en la tabla, viéndose impotente ante la máquina 'Citizen', lo que deja la sensación de que el equipo de Pep Guardiola (Manchester City) mantendrá su posición hasta el final.
Después de 11 victorias consecutivas, se esperaba una posible relajación de los locales y unos 'Bleus' que fueran por todo, sabiendo que era quizá su último tren para engancharse a la Premier. Pero no se dio ni lo uno ni lo otro.
El City, con un triplete ofensivo compuesto por Phil Foden, Jack Grealish y Raheem Sterling, que podría dar ideas a Gareth Southgate para la selección inglesa, se adelantó sin embargo, con un gol de su estrella belga Kevin de Bruyne.
El arquero vasco del Chelsea, Kepa Arrizabalaga, nada pudo hacer ante el disparo desde fuera del área de De Bruyne, a 20 minutos para el final del choque. Un tiro con rosca hacia dentro al palo largo, que hizo estéril la estirado del antiguo arquero del Athletic Club.
Potencia hegemónica del fútbol inglés los últimos años, con la excepción de 2019/2020, cuando el Liverpool supo aprovechar su bajada de prestaciones, el City es el favorito indiscutible para conquistar si cuarta Premier en cinco años.
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