Para el olvido. No hay otra forma de describir la noche que vivió Cristiano Ronaldo al convertirse en el jugador con más partidos disputados con la selección de Portugal.
El tres veces ganador del Balón de Oro desperdició un penal _y un cúmulo de otras ocasiones_ y Portugal se llevó otro desencanto en la Eurocopa al no pasar el sábado de un empate 0-0 con Austria.
A los 79 minutos, Cristiano dispuso de una inmejorable oportunidad para coronar su partido 128 con la selección. Pero con el arquero Robert Almer vencido al tirarse a su izquierda, el delantero estrelló su remate en el otro poste.
Todo un suplicio para un futbolista de ambición desmedida, uno que hace solo tres semanas fue el encargado de convertir el último disparo en la definición por penales con la que su Real Madrid venció al Atlético de Madrid en la fina de la Liga de Campeones.
No iba a ser su único chasco en el Parc des Princes, el estadio en la periferia oeste de París. Cinco minutos después, empezó a celebrar un gol tras un cabezazo, pero se lo anularon por posición adelantada.
Se despidió masticando amargura tras superar el récord que compartía con Luis Figo, y sigue esperando por el gol que le permita convertirse en el primero que anota en cuatro ediciones distintas de la Euro.
Necesitará marcar más que nunca en el último partido de Portugal en el Grupo F, el próximo miércoles contra Hungría en Lyon. Portugal corre peligro de despedirse a las primeras de cambio tras haber empatado en el debut contra Islandia.
"No podemos deprimirnos más con nuestra miseria", dijo el técnico portugués Fernando Santos. "Tendremos una final el día 22, nuestra primera final de esta Eurocopa".
Austria sumó su primer punto, pero sigue en la cola de la llave, en la que Hungría lidera con cuatro unidades tras conseguir un empate 1-1 contra Islandia en Marsella, logrado con un autogol en los minutos finales.
Tras el empate contra los debutantes islandeses, Cristiano causó revuelo por sus comentarios despectivos hacia la selección de un país con la menor población que compite en un gran torneo internacional.
"Son de mentalidad pequeña", dijo Cristiano, perplejo por las celebraciones de los islandeses por llevarse aquel punto en Saint-Etienne.
Tampoco se pudo desquitar en la capital francesa. "Messi, Messi, Messi". Así fue la mofa de los hinchas de Austria cuando el astro del Real Madrid tocaba el balón.
El partido acabó con una anécdota, en el que un aficionado se internó en la cancha para acercarse a Cristiano. Un agente de seguridad derribó al individuo, pero el luso intervino y se sacó una selfie con él.
Ese debe ser un bonito recuerdo, pero seguramente preferirá olvidar lo demás del partido. El portero Almer fue la figura de Austria, con un rosario de intervenciones, incluyendo una secuencia en la que repelió un disparo de Nani y luego manoteó la reiteración de Vieirinha.
Fue un partido que Portugal mereció ganar, por un avasallador dominio territorial y de remates. Pero careció de finura en el último cuarta de cancha dentro de un partido en el que acumuló 23 remates contra los apenas tres de los austríacos.
"Ahora no tiene sentido ponerse a hablar de cuántas ocasiones hemos tenido, que si es justo o inmerecida. Así es el fútbol", dijo Santos.
Con Joao Moutinho a cargo de la creación en el mediocampo, Portugal generó constante peligro. Cristiano se perdió un gol hecho a los 28 tras recibir dentro del área un pase de Nani. Lo tuvo para definir con la derecha, pero cambió con su izquierda y disparó desviado.
No ocultó su fastidio, elevando la mirada al cielo. La angustia no iba a terminar ahí, acentuada cuando no supo aprovechar la oportunidad de marcar de penal luego que fuese derribado por Martin Hinteregger.
"Si ese balón terminaba en gol, podríamos preparando el viaje de vuelta a Austria", indicó el seleccionador austríaco Marcel Koller. "Ahora seguimos vivos en el torneo".
El Grupo F está abierto, aunque con Hungría mejor perfilado sobre los tres que les persiguen. El otro duelo el miércoles será en Saint-Denis, con el Austria-Islandia.
También el sábado, Bélgica revivió dentro del Grupo E al vencer 3-0 a Irlanda, con un doblete de Romelu Lukaku. Bélgica (3 puntos), Suecia (1) e Irlanda (1) siguen en carrera. Clasificada de antemano, Italia (6) cerrará contra Irlanda y Bélgica lo hará con Suecia.
La victoria belga aseguró que Italia acabará primera en la llave, y ahora queda a la espera sobre quién quedará segundo en el Grupo D, entre España, Croacia o la República Checa, para conocer su rival en los octavos de final.
París | AP
