El técnico vallecaucano Reinaldo Rueda abandonó este domingo, en medio de un gran hermetismo, el Centro Médico Imbanaco de Cali, donde el miércoles pasado fue sometido a una cirugía de cadera.
Rueda fue dado de alto después de que uno de los médicos que llevó a cabo la operación, el doctor León Alberto Sardi, constatara que el entrenador ha evolucionado favorablemente.
"Gracias a Dios la cirugía salio bien; quiero agradecer a la Clínica Imbanaco, a los médicos que me operaron, a las enfermeras, a Coomeva, al Atlético Nacional y a los hinchas del fútbol por el apoyo que me han dado todos estos días", señaló Rueda.
En el momento de abandonar la clínica a Rueda lo acompañaban sus más cercanos familiares, quienes lo trasladaron a su residencia en el sur de Cali, donde continuará su proceso de rehabilitación.
Al entrenador caleño, que el año pasado le dio al Atlético Nacional el título de la Copa Libertadores de América, se le hizo una cirugía con la que se busca recuperar la articulación izquierda de su cadera, consumida por la artrosis.
La intervención fue dirigida por los ortopedistas León Alberto Sardi y Mario Figueroa, profesionales del Centro Médico Imbanaco, quienes introdujeron una prótesis de metal y polietileno en la cadera del ‘profe’ Rueda, para unir al fémur de su muslo izquierdo con su pelvis.
“Reinaldo tenía una cadera bastante destruida. Fue una cirugía compleja, pero todo salió muy bien. El procedimiento consistió en colocar un implante en la cabeza del fémur y del acetábulo, que no tenían cartílagos, para que tuviera una movilidad normal”, precisó el médico Sardi.
El técnico podría volver a su trabajo normal en tres meses o antes si la recuperación se mantiene como hasta ahora se ha dado, es decir, con buenos resultados.
