Veinte días fueron suficientes para que las autoridades capturaran al soldado profesional José del Carmen Durán Ropero, responsable de abusar sexualmente de una niña de 11 años, el pasado 27 de diciembre, en zona rural de la vereda Caño Indio (Tibú).
Luego de conocerse los resultados de la prueba de ADN que practicó el Instituto de Medicina Legal, se pudo establecer que Durán fue el agresor de la menor. (Lea también: Soldado es sospechoso de abuso sexual contra una niña)
El militar, con 10 años de servicio en la institución, agarró a la fuerza a la niña a las 9:00 de la mañana del 27 de diciembre mientras caminaba hacia una tienda que está ubicada a 15 minutos de su casa y abusó de ella, tocándole sus partes íntimas y eyaculando en su cuerpo.
Las descripciones que entregó la víctima sobre el atacante, indicaban que se trataba un hombre vestido con prendas militares, botas pantaneras y un fusil. (Lea además: Entre Progreso Dos y Caño Indio, una niña fue víctima de ataque sexual)
De acuerdo con los detalles conocidos, la niña acostumbraba a ir a una tienda situada entre El Pogreso y Caño Indio, convirtiéndosele para ella ese día decembrino en una pesadilla para ella, cuando fue atacada sexualmente.
El soldado Durán Ropero fue señalado como sospechoso, por lo que el Ejército lo trasladó a Cúcuta en compañía de la familia de la niña abusada y representantes de la comunidad de Caño Indio, para que se adelantaran las investigaciones.
El uniformado junto a otros cuatro miembros del Ejército que se encontraban en Caño Indio, fueron sometidos a las pruebas para identificar al agresor. (Lea también: Sigue incertidumbre por el caso de abuso sexual contra una niña)
Al conocerse el resultado de los análisis que lo señalaron a él como el autor de la agresión sexual, el Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas) de la Fiscalía General de la Nación, que lideraba las investigaciones, presentó a Durán Ropero ante un juez por el delito de abuso sexual en menor de 14 años.
En la noche de este lunes, mientras se adelantaba la audiencia concentrada, el soldado profesional aceptó cargos y fue enviado a la cárcel de la capital de Norte de Santander.
La mamá de la menor dijo que quedó satisfecha con la acción de las autoridades que pudieron identificar al agresor de su hija y ahora pagará a la justicia por este aberrante hecho.
“Tengo rabia de mirar a ese hombre ahí contando lo que hizo”, dijo la mujer.
El comandante de la Fuerza de Tarea Vulcano, general Hugo Alejandro López, lamentó y rechazó la actuación de Durán Ropero y la calificó como “una determinación individual que no representa en ningún aspecto la voluntad de servicio de los soldados de Colombia”.
El oficial insistió en que la institución tiene la disposición de apoyar la investigación penal y dar celeridad a los procesos disciplinarios contra el militar.
Asimismo, dijo que se continuará brindando apoyo a la familia de la menor con un acompañamiento de profesionales de Sicología, Medicina y Trabajo Social.
Entre tanto, Luis David Rincón, presidente de la junta de acción comunal de Caño Indio, aseguró que espera reunirse con los habitantes de la zona para tomar alguna decisión sobre la presencia de unidades militares en esa región del Catatumbo.
Caño Indio fue seleccionado como zona veredal para la concentración de los guerrilleros de las Farc que hacen presencia en el Catatumbo y que se acogieron al proceso de paz firmado con el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos.
