El agente de Policía Martín Soto Soto, quien ya había estado ante los estrados judiciales, señalado por presuntos nexos con los paramilitares, enfrenta un nuevo proceso y avanza un juicio en su contra por dos delitos.

Soto Soto, quien fue escolta del exalcalde de Cúcuta Ramiro Suárez Corzo (condenado por homicidio agravado), fue capturado a mediados del 2004 por la Unidad Nacional de Derechos Humanos de la Fiscalía. Sin embargo, el 7 de diciembre de 2005 recobró la libertad.

Para entonces, se conoció que las autoridades tenían  pruebas que lo vinculaban con Carlos Enrique Rojas Mora, ‘El Gato’(asesinado en 2004), señalado de ser el jefe militar del Bloque Fronteras de las autodefensas, que operaba en la capital de Norte de Santander, y de servir como presunto intermediador de funcionarios públicos con los ‘paras’.

Para 2004, los paramilitares habían logrado infiltrar varios organismos del Estado, hasta llegar a la misma Dirección Seccional de Fiscalías, a cargo de Ana María Flórez, hoy prófuga de la Justicia.   

Según publicaron diarios nacionales, Soto presuntamente se valía de su posición y del nombre de altos funcionarios gubernamentales para mediar en favor de los ‘paras’.

“Una fuente de la Policía infiltrada en los ‘paras’ contó también que Soto era el enlace de ‘El Gato’ con funcionarios y autoridades de Norte de Santander. En un informe oficial incluso se señala que Soto y ‘El Gato’ son grandes amigos y acostumbraban a hacer parrandas”, reseñó para entonces el diario El Tiempo.

Nueva captura

El nombre de Martín Soto Soto volvió a sonar en 2015 tras una nueva orden de captura en su contra.

Esta vez, la Fiscalía-Bacrim lo llamó a responder en un nuevo proceso por los delitos de concierto para delinquir y fabricación, tráfico y porte ilegal de armas, al parecer, por nexos con bandas criminales.

Ante un juzgado especializado de Cúcuta avanza el juicio oral y público, en el cual el ente investigador ya presentó el material probatorio y a sus testigos.

La semana pasada estaba citada la audiencia en que la defensa proseguiría con su parte, pero la diligencia fue aplazada por ausencia de los declarantes. Motivo por el cual, el Juzgado llamó la atención al abogado de Soto Soto, tras cuatro meses de espera.

El jurista argumentó que la intención de Soto Soto era llegar a un acuerdo con la Fiscalía (conocido como manifestaciones de culpabilidad preacordadas) a cambio de un beneficio en la pena, pero no se logró. Por tanto, continuarán con la presentación de sus testigos.

La audiencia fue citada para el próximo 8 de junio.