Cuatro días después de registrarse el asesinato de Jesús María Sepúlveda Ortiz se conocieron nuevos detalles que dejan inquietas a las autoridades judiciales y que le daría fuerza a la versión de los familiares, quienes afirman que a él lo mataron por robarlo.

Cuando se creía que el anciano, de 76 años, murió por los golpes que recibió en la cabeza con una piedra, propinados supuestamente por una adolescente venezolana, de 17 años, que lo acompañaba, al parecer, no fue así.

Los resultados de la necropsia que Medicina Legal le practicó a la víctima, indican que Sepúlveda falleció a causa de golpes contundentes en su cuerpo.

Esta información le dio un giro a las pesquisas e hizo más fuerte la versión entregada por los hijos de Jesús María, quienes desde el primer momento han sostenido que la menor de edad y otros cómplices cometieron el homicidio para robarle un dinero que su papá llevaba.

¿Una historia falsa? 

El pasado lunes 3 de septiembre, hacia la 1:30 de la tarde, algunas personas que se encontraban por el sector La Playita, del barrio Manuel Beltrán, vieron pasar a Jesús Sepúlveda en compañía de una joven. 

“Los dos bajaron por el canal y se metieron por una trocha, minutos después la muchacha salió corriendo y venía ensangrentada”, contó un habitante de ese sector del suroccidente de Cúcuta.

Las personas al ver a la adolescente, se le acercaron a preguntarle qué le había pasado y ella les aseguró que el anciano había tratado de abusar sexualmente de ella y que se defendió, golpeándolo con una piedra en la cabeza.

Después de llevar a la joven a una casa del lugar, ella mostró un maletín (que pertenecería a la víctima) donde había un cuchillo, una porra, unas hojas con unas indicaciones extrañas de cómo asesinar a alguien, además de unas oraciones, una ropa, una toalla y hasta un jabón.

Siguiendo con su relato, según contó una habitante del sector, la menor de edad les manifestó que una vez entraron a la trocha, Jesús María comenzó a decir una oración como satánica, lo que la asusto.

Serías dudas

Después de escuchar a la muchacha, la comunidad le preguntó el sitio donde quedó tendido el hombre. Ella les dio algunas indicaciones, pero cuando fueron a buscarlo no lo hallaron, por lo que comenzaron las dudas.

Solo cuando llegó una patrulla de la Policía, pasadas casi dos horas, ubicaron el cuerpo de Sepúlveda. Lo extraño es que en el sitio se podían ver marcas de sangre como si hubiese sido arrastrado.

Ante eso, los investigadores judiciales no creyeron del todo la historia y por eso decidieron aprehender a la menor de edad y dejarla a disposición de las autoridades de infancia y adolescencia.

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Lo que habría pasado

Con más testimonios y otras pruebas, las autoridades creen que la adolescente junto con otras personas asesinaron presuntamente a Jesús María Sepúlveda.

Los investigadores conocieron que el hombre, momentos antes de ir hacia Manuela Beltrán, a cobrar un dinero que prestó, fue al banco y retiró una fuerte suma de dinero.

Esta nueva versión indicaría que una vez la víctima y la joven estaban entre los matorrales de La Playita, otras personas les salieron al paso y junto con ella le quitaron el dinero al abuelo, pero como él se defendió, lo asesinaron a golpes con la porra que llevaba en el maletín.

Lo confuso para los ‘sabuesos’ de la Fiscalía, es cómo llegaron otros compinches de la menor, sin que la gente no se diera cuenta, y por dónde huyeron.

Otro elemento clave que no encajó con la versión preliminar entregada por la menor de edad fue el afirmar que no conocía a Sepúlveda, cuando ellos convivían desde enero de este año, según juraron los mismos parientes del occiso.

“Son muchas cosas que no nos cuadran y que debemos ir al fondo. Aunque la adolescente fue enviada a un centro de resocialización. Lo cierto es que en este caso ‘hay gato encerrado’”, sostuvo una fuente judicial.