Sobre las 5:30 de la tarde un hecho sin precedentes alertó a la comunidad pamplonesa.
Una mujer, que fue identificada como Juliana Bolívar Jaimes, y su hija, Marleni Valentina Ramírez Bolívar, fueron asesinadas este miércoles en una vivienda de la zona rural de Pamplona, ubicada en la vía que conduce a Cúcuta.
Las primeras versiones indican que dos desconocidos aprovechando que la familia se encontraba de trasteo, amarraron y amordazaron al esposo de la víctima, Henry Ramírez, y lo golpearon fuertemente. El hombre al parecer, logró quitarse la mordaza y pedir ayuda. Unos vecinos, trabajadores en un montallantas lo escucharon y auxiliaron. Posteriormente al dirigirse a la otra vivienda, encontraron la macabra escena.
Juliana, de 30 años, había sido ahorcada con un cable, y la pequeña de 9 años había sido asfixiada. El hecho se presentó a unos metros del sector conocido como 'La Vuelta de los Adioses'.
De inmediato llamaron a las autoridades, quienes se dirigieron al lugar para realizar el respectivo levantamiento de los cuerpos y hacer la recolección de pruebas.
La familia tenía una panadería a la orilla de la carretera. La mujer era reconocida en el sector por su generosidad y amabilidad, pues en muchas ocasiones ayudó a los caminantes de la vía, entre ellos a muchos venezolanos que transitaban por allí.
Según el Departamento de Policía de Norte de Santander, estas personas al parecer habían hospedado "a unas personas de nacionalidad venezolana a quienes les habían dado empleo como vendedores ambulantes de verduras".
