Eran jóvenes, sus manos las tenían atadas por la espalda.
Eran las 12:30 de la noche del jueves. Una balacera se escuchó en el río Táchira, en inmediaciones al puente internacional Simón Bolívar de La Parada (Villa del Rosario). Diez minutos después, cuando la calma volvió quedó el presagio de que algo malo ocurrió.
Acto seguido, uniformados de Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) que patrullaban la zona, se percataron de que dos hombres fueron asesinados. Eran jóvenes, sus manos las tenían atadas por la espalda y presentaban varios disparos en la cabeza.
Los trajeron a territorio colombiano
Los dos hombres tenían sus prendas mojadas.
“Lo mismo de siempre: encapuchados armados atacan a hombres y los persiguen hasta zona colombiana y los dejan en nuestro territorio muertos”, dijo una fuente judicial cercana al caso.
Según se conoció, todo habría ocurrido por la disputa por el control que tienen grupos armados que operan en esa zona fronteriza.
Sin identificar
Aunque, de nuevo las autoridades colombianas practicaron el levantamiento de los cadáveres, no le fueron encontrados documentos para ser identificados.
Los cuerpos fueron enviados a las instalaciones de Medicina Legal a la espera de familiares que puedan reconocerlos.
La Opinión conoció que uno de los hombres tenía tatuado en el antebrazo izquierdo, un dragón de color rojo y negro. Mientras que el otro dos tatuajes con el nombre de Eduingso y la frase “Amor de familia”.
