Maycken Joysse Marín Pedraza y Yamid Orellanos Lizcano, vinculados al proceso judicial por el secuestro y posterior asesinato del exalcalde de Salazar de las Palmas, Jesús Emilio Ayala, quedaron en libertad, por vencimiento de términos.
Dicha decisión no cayó bien entre los familiares de la víctima por las circunstancias que rodearon el crimen y la presunta responsabilidad y peligrosidad de los implicados.
Jesús Emilio Ayala fue secuestrado el 21 de febrero de 2015 por cinco delincuentes que llegaron a su finca llamada Urbanas, a cinco minutos del casco urbano de Salazar de las Palmas.
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Después de un mes, cuando ya lo habían asesinado llamaron a la familia de Ayala a pedirle $500 millones por su liberación.
El Juzgado Cuarto Penal del Circuito de Cúcuta les revocó la medida de aseguramiento en prisión, aunque seguirán vinculados al proceso desde la libertad con el riesgo de que evadan a la justicia.
Por estos hechos, también fue detenido Eduard Orellanos Lizcano, ‘Chorro’, hermano de Yamid, quien confesó ante las autoridades el lugar donde enterraron el cadáver.
El 17 de noviembre de 2016, Chorro llegó a un preacuerdo con la Fiscalía que consistió en aceptar su culpa a cambio de ser condenado por la pena mínima del delito más grave.
El enero de 2017, fue condenado a 36 años de prisión por homicidio agravado, concierto para delinquir agravado, hurto calificado y agravado, secuestro extorsivo agravado y porte ilegal de armas.
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Chorro reveló que el exalcalde fue asesinado 20 días después de haber sido secuestrado, porque no les hacía caso y hasta intentó escapárseles.
“El acusado fue judicializado luego de desarrollarse una ardua investigación, de la cual resultó que había acordado ejecutar diferentes delitos. Propósitos que fueron materializados hasta poner fin a la vida del secuestrado, tal como lo demuestran los elementos de prueba y lo admitió el acusado al aceptar su responsabilidad”, señaló el juzgado en su decisión.
Jesús Emilio Ayala era tío del alcalde de Cúcuta, César Rojas Ayala.
