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Fatal accidente: rodó 180 metros por un abismo

Perdió la vida cuando era remitido en una ambulancia hacia Cúcuta.    

Jesús Antonio Salazar Contreras rodó 180 metros por un abismo, al perder el control de su camioneta el viernes a las 3:30 de la tarde. Aunque trataron de auxiliarlo, perdió la vida cuando era remitido en una ambulancia hacia Cúcuta.    

Salazar Contreras, de 33 años, natural de Pamplona, era  administrador de una cabaña en Chinácota. Tenía dos hijos y esperaba el tercero con su esposa.

Los familiares relataron que Jesús salió de trabajar en una motocicleta, acompañado de su hijo, de 9 años, hasta la vereda Lobatica, donde viven la mamá y los hermanos.

En la finca paterna guardaba la camioneta Toyota Land Cruiser, blanca, en la cual regresó  a la cabaña.

“Él planeaba traer esa tarde a la hija de un año y a la esposa que tiene cinco meses de embarazo, para pasar el fin de semana en familia”, indicó una hermana.

El administrador salió de la finca hacia las 3:00 de la tarde, y según dijeron sus familiares, el  recorrido que debía hacer de regreso a Chinácota era de unos 40 minutos, por lo que, tras un par de horas sin saber nada de él, se afanaron y empezaron a llamar a todas partes para saber de su paradero.

Finalmente, fue un concejal de Chinácota quien les informó sobre el accidente en el sector El Caney y les advirtió que Jesús Antonio se encontraba en delicado estado de salud.

Traslado

Salazar Contreras fue auxiliado por varias  personas y trasladado al hospital de Chinácota, desde donde fue remitido a un centro asistencial de Cúcuta, pero “cuando iban a la altura de El Malecón, falleció; eran pasadas las 6:00 de la tarde”, recordó la hermana.

Aunque las autoridades no entregaron un reporte del accidente, la familia cree que pudo tratarse de una falla mecánica o el estallido del caucho delantero izquierdo, que apareció dañado y fue justo hacia ese costado que se volcó la camioneta.

Su hijo se salvó

Los familiares añadieron que afortunadamente el hijo de Salazar Contreras no quiso regresar a Chinácota con su padre, a pesar de que él le abrió la puerta de la camioneta para que se subiera.

“De lo contrario, la tragedia hubiera sido peor para nosotros”, concluyó la hermana.

Los restos del administrador fueron llevados hasta Pamplona, donde se cumplirán las honras fúnebres.

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Domingo, 16 de Julio de 2017
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