Un sector oscuro y desolado del anillo vial oriental se convirtió ayer en un escenario de muerte.

A la 1:30 de la madrugada, varias unidades de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) fueron alertadas que al  lado de un carril, cerca de una torre de energía, había un cadáver. Se trataba de un hombre que vestía bluyín y botas, tenía tres impactos de bala en la cabeza y estaba tirado bocarriba, al lado de un charco de sangre.

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Algunas personas le manifestaron a los uniformados que escucharon varios disparos. “Nosotros la verdad como esto es tan solo de noche nos dio miedo que nos hirieran. Cuando sonaron los tiros esperamos varios minutos y luego nos encontramos con esa escena”, indicó un vecino.

Los uniformados le dieron aviso a la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para que arribara a la zona, mientras las unidades de la Mecuc custodiaban la escena.

Al llegar hasta el sitio, los investigadores de la Brinho recopilaron dos vainillas, calibre 9 milímetros, que serán claves para iniciar las investigaciones. Luego descubrieron que la víctima no tenía consigo algún documento de identidad. El cuerpo permanece en la morgue de Medicina Legal.

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