En la mina de carbón La Mestiza, ubicada en la vereda El Abarico, de El Zulia, ya se habría presentado un accidente, por el cual fue sancionada y cerrada por varios meses. Hace apenas 12 días recibieron el aval para levantar la medida y retomar sus actividades de explotación de carbón, las mismas que generaron el accidente que hoy tiene a 14 mineros desaparecidos y uno debatiéndose entre la vida y la muerte.
Estos detalles los dio a conocer Jhon Olivares, secretario de Minas de Norte de Santander.
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Hoy, en este mismo socavón se viven momentos de angustia, pues desde el lunes 30 de mayo se perdió el rastro de los 14 mineros y la esperanza de encontrarlos con vida, a medida que pasa el tiempo, son cada vez más escasas. Otro obrero se encuentra en delicado estado en el Hospital Universitario Erasmo Meoz, por las graves quemaduras que tiene en su cuerpo.
Según el funcionario, “la mina La Mestiza tuvo una suspensión de trabajos el 17 de marzo de 2021 por un accidente que ocurrió ahí. El 19 de abril del mismo año la Agencia Nacional de Minería (ANM) le hizo una visita y verificó las condiciones que se encontraban en el sitio, para ver si cumplían con la normatividad, para levantar esa suspensión y el pasado 19 de mayo, hace apenas 12 días, se le notifica al titular el levantamiento de esa suspensión para que pueda regresar a las labores”.
Pero ahora con esta reciente tragedia, el funcionario de la Gobernación de Norte de Santander se muestra preocupado y dejaría entrever que algo no estuvo bien en ese procedimiento que se adelantó para el inició de trabajos en ese enorme socavón.
“La pregunta que tenemos que plantearle a la Agencia Nacional de Minería es cómo, tan solo 12 días después de la notificación del levantamiento de la suspensión de actividades, ocurre una tragedia de este tipo en esa misma mina”, señaló Olivares.
Agregó: “yo conozco el informe del levantamiento, donde se ordenaba mejorar el circuito de ventilación en una de las áreas donde habían sido suspendidas las labores y se ordenaba adelantar trabajos para reconstruir el circuito de ventilación, ese fue el informe que hizo la Agencia Nacional de Minería”.
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Aunque se le preguntó al secretario de Minas departamental si creía que esa primera situación desencadenó la tragedia del lunes 30 de mayo, dejando 14 mineros atrapados y uno más con graves quemaduras en el 85% de su cuerpo, él respondió que, “como funcionario no puedo adelantarme a manifestar nada de lo que pudo provocar el accidente, pero lo que si podemos decir es que cómo es posible que hace apenas 12 días le hayan levantado una suspensión y luego de más de un mes que la agencia adelantó una visita para validar las condiciones de la mina, hoy estemos contando una tragedia como esa. Algo tenemos que revisar ahí de lo que sucedió”.
Sobre las labores de rescate de los mineros y la situación que se vive en estos momentos en la mina, el funcionario indicó que, “en este momento nos estamos desplazando hacia el sitio para tratar de acompañar, en lo que nos resulte posible, las labores de rescate y de ayuda que actualmente adelanta el equipo de salvamento de la agencia, pero lo que nosotros si queremos es, una vez se haya superado esta tragedia, qué tipo de fiscalización se está brindado y qué tipo de trabajos es los que está realizando la Agencia Nacional de Minería, porque este es un título minero que contaba con todos los permisos para trabajar”.
Añadió: “nosotros creemos en la minería y en nuestros mineros, y este es un sector que genera más de 40 mil empleos entre directos e indirectos para Norte de Santander y aporta más del 20% del Producto Interno Bruto (PIB) al departamento. Creemos en las personas que hacen su trabajo bien y en los empresarios que están desarrollando su actividad legalmente, pero si queremos profundizar en cuál es el trabajo que está realizando la agencia en el departamento y cuáles son las condiciones de seguridad que están verificando para que las labores se sigan dando y que las personas puedan trabajar de forma segura y responsable para que puedan regresar a sus hogares”.
Jhon Olivares también fue enfático al manifestar que la situación que en estos momentos se vive en la zona de la mina es muy difícil, pues la comunicación no es buena y los socorristas como organismos de control no han podido entregar un reporte claro de lo que está pasando.
“No hemos podido hablar con el titular minero porque las condiciones de comunicación en el sitio son bastante complejas, hemos mantenido comunicación con el Ministerio de Minas y Energía, con la Agencia Nacional de Minería, mientras que la Oficina de Gestión de Riesgos de Norte de Santander está allí presente, suministrando la colaboración pertinente, además se tiene contacto con las autoridades policiales y militares para la seguridad de la zona y también estamos solicitando el apoyo de las otras minas con el personal de salvamento para que asistan y ayuden a las personas que allá se encuentran trabajando desde ayer en el rescate de los mineros atrapados”.
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Para finalizar, Olivares explicó las funciones que cumple la Agencia Nacional de Minería, que es la titulación minera, como la fiscalización de las labores que se realizan, “mientras que la Secretaría de Minas de Norte de Santander debe fomentar y asistir a los mineros, además de acompañar a los titulares mineros para tratar de brindarles todo el apoyo”.
Momentos de angustia
En la desolación y angustia se encuentran los familiares de los 14 mineros atrapados en la mina.
Aunque algunos seres queridos de los obreros llevan casi 24 horas en la entrada de la mina, el último reporte que conocieron por parte de los organismos de socorro fue hoy a las 5:00 de la mañana, y es poco alentador.
Lo que les explicaron, es que ya despejaron parte de la bocamina e ingresaron algunos hombres en busca de los mineros, sin embargo, se encontraron con un derrumbe adentro y además, continuaba existiendo una gran concentración de gas, por lo que tuvieron que devolverse a crear una estrategia para solucionar ese inconveniente.
Se espera que en las próximas horas, el alcalde de El Zulia, Manuel Pradilla, dé el reporte oficial de la situación en la mina.
