Familiares del venezolano Edies Eduilxon León Zapata confirmaron ayer, a las afueras de Medicina Legal, que su ser querido era el joven que apareció muerto y envuelto entre sábanas y cobijas el primero de mayo, en un caño de aguas negras de La Parada, Villa del Rosario.
De León Zapata, de 24 años y natural de Caracas se supo que trabajaba vendiendo agua por los alrededores de la Terminal de Transportes de Cúcuta, pero desde la mañana de ese mismo día, cuando salió a trabajar le perdieron el rastro.
“Él me dijo que se iba al puesto a vender agua, como lo hacía todos los días; yo salí en la noche a buscarlo, pero no lo encontré. Ese viernes no regresó a dormir. No le presté atención porque él siempre se iba con unas ‘chamas’ a rumbear y llegaba uno, dos o tres días después, entonces no me pareció raro que no llegara a dormir”, sostuvo la hermana de Edies.
Pero, el domingo, cuando alguien le mostró la noticia publicada por La Opinión se enteraron de su muerte. “Yo leí sobre la descripción de los dos tatuajes, uno en forma de una corona en el cuello y otro en el pecho, con la palabra Marisela, que es el nombre de mi mamá y supe que se trataba de él”, añadió la familiar.
Desaparecido
El drama no terminó con el hallazgo de León Zapata. La angustia sigue para esta familia tras contar que otro familiar también está desaparecido.
“Se trata de mi marido Ewdar Manuel Mendoza Matera, de 20 años. Él también vendía agua con nosotros, pero desde el jueves 30 de abril, no regresa a la residencia donde vivimos”, dijo la hermana de Edies.
Mendoza Matera viste un buso rosado que tiene el estampado ‘Real hasta la muerte’, además de una bermuda negra y tenis (rojo y blanco). También tiene unos tatuajes en la frente, uno es el nombre Eucarys, otro un marciano y también unos diamantes. En el pecho, tiene la frase en inglés: ‘Love family’.
Ewdar Manuel Mendoza Matera.
