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Soldado cucuteño murió tras enfrentamiento en Chocó
Hugo Mendoza, de 33 años, llevaba dos años en Quibdó y era integrante del Gaula.
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Jueves, 24 de Mayo de 2018

En los familiares del soldado profesional Hugo Alberto Mendoza Monroy quedarán grabados para siempre los momentos felices que compartieron con él en su humilde casa, ubicada en el barrio Bellavista de la ciudadela La Libertad. 

El militar cucuteño fue atacado a disparos el fin de semana en el departamento de Chocó.

Mendoza pasó los últimos 13 años portando el uniforme del Ejército. Desde hace dos años estaba radicado en Quibdó, adscrito al Grupo de Acción Unificada para la Libertad Personal (Gaula).

“Él siempre soñó con pensionarse en el Ejército. Era feliz en lo que hacía”, dijo un pariente.

La última vez que estuvo con su familia en Cúcuta fue en enero de este año, cuando llegó de permiso y pasó su cumpleaños junto a sus seres queridos.

“Siempre llegaba y era muy contento, se ponía a bajar mangos del árbol”, dijo una de las hermanas de Hugo Alberto. 

Mendoza, de 33 años, el mayor de cuatro hermanos, dejó a dos hijos menores de edad.

¿Qué pasó?

La familia del militar contó que Hugo Alberto atendió un llamado de la comunidad en medio de un atraco, junto a un grupo de militares, lo que generó un intercambio de disparos en el que resultó herido en el glúteo izquierdo. El hecho ocurrió el sábado 19 de mayo en la vía Pacurita.

Mendoza fue trasladado a Quibdó, pero por falta de los equipos médicos necesarios para atender la herida, tuvo que ser remitido al Hospital Militar, en Bogotá.

Allí, llegó consciente, pero a las 2:45 de la madrugada del pasado domingo, Hugo Alberto finalmente murió.

Las exequias del militar se cumplieron el miércoles, en el barrio Bellavista, donde creció junto a su familia.

En medio de una caravana fúnebre, familiares y amigos del uniformado lo acompañaron hasta su última morada.

Familia militar

Nelson, hermano de Hugo Alberto, también es uniformado del Ejército en el rango de sargento segundo.

El suboficial recordó que cuando su hermano se enfrentaba en combates con grupos armados ilegales siempre lo llamaba a contarle y a pedirle consejos.

“Éramos muy unidos y yo siempre le pedía que se cuidara mucho”, explicó Nelson.

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