María de los Ángeles Briceño Barón, de 11 años, se fue asustada de su casa y desde entonces su mamá María Alejandra, de 28, no ha podido conciliar el sueño y clama toda la ayuda de la ciudad para encontrarla.
La madre venezolana pasaba sus vacaciones en Cúcuta, donde el padrastro de las pequeñas logró encontrar un trabajo como maestro de construcción. Todo comenzó la tarde del pasado miércoles (14 de agosto).
“Estuve con ella y mis otros niños en el parque porque estaban aburridos. Nos fuimos a pasear el perrito y a que jugaran. A las 5:30 de la tarde les dije que debíamos volver y me vine por un lado y ella por otro. Cuando llegué a la casa regresó al parque y alcancé a gritarle que se devolviera, pero no entró a la casa”, contó la madre.
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Estando en la puerta, la niña alcanzó a decirle a su mamá que el motivo por el que no ingresaba era por temor a que le pegara, pues minutos antes ella había dejado caer a su hermano menor.
“Le dije que entrara porque iba a llegar su papá y la encontraba en la calle’, pero no me hizo caso, sino que agarró a correr y cruzó la calle. Desde entonces, me puse a buscarla, pero no la encuentro”, añadió la madre.
Minutos después de que la pequeña María de Los Ángeles no regresara, su mamá llamó a una de las tías de la menor que reside en el barrio Camilo Daza y allí estaba. Pero, al saber que su madre la buscaba se escapó.
Desde esa noche, junto a su marido y demás familiares han buscado a la menor, pero no han dado con ella.
“Lo que quiero es que vuelva. Me da mucho miedo que alguien le pueda hacer algo, por eso no paro de ir a buscarla, porque me da pavor no saber qué le pueda esperar en la calle”, dijo la madre angustiada.
La Policía Metropolitana de Cúcuta se sumó a la búsqueda y desde ayer reparte volantes para dar con su paradero.
