Los violentos no tienen ningún impedimento para hacer de las suyas.
El corregimiento Campo Dos, de Tibú, volvió a ser el escenario de un ataque contra la Policía en el departamento. Allí, los violentos no tienen ningún impedimento para hacer de las suyas, ni le temen a la misma autoridad. La noche del domingo fue atacado a balazos el patrullero Melkisede García Rubio, quien recibió dos impactos en la rodilla izquierda.
Según se conoció, a las 7:15 de la noche, dos hombres que se movilizaban en una motocicleta arribaron hasta la subestación de Policía y de inmediato dispararon contra el uniformado que estaba designado como jefe de información.
Mientras los agresores huían, los enfermeros policiales atendieron al patrullero que no presentó ninguna gravedad. Sin embargo, posteriormente fue trasladado a un centro médico en Cúcuta para que se adelantaran los procedimientos necesarios.
Un muerto
Horas más tarde, la Policía volvió a tener otra alteración en las instalaciones policiales, cuando el tibuyano Rubén Darío Sandoval Carrillo, de 31 años, quien se movilizaba en una camioneta, omitió la señal de pare en el puesto de control.
Según informó la Policía, Sandoval disparó contra los uniformados, lo que generó una reacción y un intercambio de balas, que terminó acabando con su vida.
“Él no paró, entonces le empezaron a disparar, se bajó del carro y también le disparó a los policías, pero como habían dos grupos de uniformados, uno de estos en el parque, él (Sandoval) quedó encerrado y ahí murió”, dijo un habitante de la zona. El cadáver del pistolero quedó tendido en el andén, hasta donde arribó la funeraria San Miguel para levantarlo y llevarlo a Medicina Legal.
