Liz Zamara Yanquen Flórez porta la banda de Señorita Chinácota a pesar de haber nacido en Pamplona. Sin embargo, tiene muchas metas trazadas si gana el título de Señorita Norte de Santander.
Se convertirá, por ejemplo, en la vocera de ‘La casa bonita’ dando dará conocer todas sus bondades. Chinácota “es un lugar agradable para el esparcimiento, donde te puedes conectar, reactivar”. Y la invitación que hace es para que conozcan a ese turístico municipio que goza de un buen clima y puede ser preferido para pasar unas vacaciones o simplemente para un fin de semana.
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El concurso será la mejor vitrina y si tiene la oportunidad de viajar a Cartagena resaltará también las fortalezas de Norte de Santander, especialmente la de sus mujeres a quienes considera empoderadas, luchadoras incansables.
Liz Zamara es la menor de tres hermanos y está agradecida porque recibe continuo apoyo de su familia con todo lo que emprende. Siempre ha sido así, incluso cuando niña su madre la llevaba a todos los escenarios donde se le antojaba actuar. Su primera experiencia en reinado de Pamplona fue en el 2018 durante las fiestas y ferias, donde ganó.
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Se define como una mujer “segura, sencilla, carismática, disciplinada y apasionada por lograr mis metas”.
Recuerda que su primer colegio, Nuestra Señora del Rosario, se cerró y pasó al Seminario Menor Santo Tomás de Aquino en el que salió de bachiller, con énfasis en valores y el servicio a las comunidades. Y desde entonces ha tenido la sensibilidad a flor de piel. Lo comprobó cuando fue presidenta del Club Rotario en la modalidad Interact, donde recorrió los colegios de los barrios periféricos de la Ciudad Mitrada y se impactó con los niños comprometiéndose a apoyarlos.
Cree que nació para servir, “ayudar a los demás es mi otra vocación y una de mis obras sociales está enfocada en el Asilo San José, a los adultos mayores, dándole espacio, calidad de vida”.
Esa misma sensibilidad la tiene con los animales que están en situación de calle, “ayudándoles a buscar un hogar, dándole una mejor estadía”.
En la Universidad de Pamplona, donde cursa octavo semestre de Comunicación Social, también se ha involucrado en proyectos que trabajan en pro del medio ambiente y “de manera individual propende por la conservación de espacios verdes que es muy importante”.
Con el reinado, que se cumplirá en junio, pretende “enaltecer a la mujer, mostrando su lucha constante, su tenacidad por salir adelante y resaltar las diferentes facetas que está cumpliendo en la actualidad”.
Reitera que es extremadamente soñadora y ama a su departamento por lo que aspira ganar el título de Señorita Norte “para convertirme en la embajadora de la mujer colombiana”.
Está consciente que la belleza física es algo efímero, superficial “lo que llevamos por dentro es lo que verdaderamente nos hace humanos, visibilizarnos en una sociedad. Creo que todo es posible con el amor y la disciplina”.
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Después de terminar Comunicación Social quiere especializarse en Trabajo Corporativo y Relaciones Públicas porque está convencida que nació para inspirar y servir a los demás. Por último se siente orgullosa porque la comparan con la Señorita Colombia, Taliana Vargas.
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