La junta militar en el poder en Guinea descartó el sábado el exilio para el expresidente Alpha Condé, en detención desde el golpe de Estado, y afirmó que la transición hacia un gobierno civil se haría según "la voluntad del pueblo".
Estos anuncios tienen lugar al día siguiente de la misión de dos mandatarios de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) que presentaron a la junta las exigencias del organismo para la organización de unas elecciones en los próximos seis meses e insistieron en la liberación de Condé.
Según un portavoz de la junta, el coronel Amara Camara, el líder de los militares, el teniente coronel Mamady Doumbouya, señaló la necesidad de no repetir "los errores del pasado" y recordó que los encuentros nacionales para trazar las grandes líneas de la transición empezaron el martes. "Solo el pueblo soberano de Guinea decidirá su destino", dijo el teniente coronel.
"También está claro para todas las partes que el expresidente permanecerá en Guinea", precisó el vocero.
El viernes por la noche, la junta ya aseguró que no cedería a "ninguna presión", y desmintió los "rumores" según los cuales había negociaciones con la CEDEAO sobre la salida de Condé, detenido desde el golpe de Estado del 5 de septiembre y cuya liberación es reclamada por la comunidad internacional.
"Tendrá un trato humano digno de su rango en nuestro país", dijo la junta en un comunicado.
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