El Papa instó a un grupo de jóvenes estudiantes de un céntrico Instituto de Roma, Italia, a que se liberen de la "dependencia del teléfono", que ha considerado una "droga" que reduce la comunicación a "simples contactos".

"El teléfono móvil sirve para comunicar, para la comunicación. Es muy agradable comunicarse, pero hay un peligro de que esta droga reduzca la comunicación a simples contactos. La vida no va de ponerse en contacto sino de comunicarse", señaló el pontífice ante los alumnos del centro Visconti de Roma.

"Liberaos de la dependencia del teléfono", exhortó a continuación. Para el Papa, hay muchas dependencias a las que están expuestas los adolescentes, pero según ha señalado "la del teléfono está muy presente" en la sociedad. 

"El teléfono es útil, hay que usarlo, es bonito que todos sepan usarlo, pero cuando te conviertas en esclavo del teléfono, perderás la libertad", sostuvo al respecto.

De otro lado, el obispo de Roma también abordó el problema del bullying en los institutos, término con que se denomina al acoso escolar. Pidió que no haya ni "guerras", ni "agresiones" en el colegio donde estudian estos jóvenes a los que recibió en audiencia privada. 

"Siento tanto dolor cuando en una escuela hay acoso", afirmó el papa. Y finalmente los instó a luchar "contra esta agresividad" que es una "semilla de la guerra". "Luchad para que haya paz sin acoso, nada de acoso".