Al iniciarse el ciclo del aislamiento selectivo en el territorio nacional, la Alcaldía de Ocaña, luego de la cuarentena obligatoria debido a los 16 casos positivos con coronavirus, abrió nuevamente las puertas del Palacio Municipal para la atención al público.
“Por directrices de la Función Pública, el 30% del personal podrá regresar de manera directa y el resto con virtualidad. Se diseñó un cronograma para que ninguna oficina esté cerrada”, precisó el alcalde Samir Casadiego.
Instó a un mayor compromiso social con una rigurosa etapa en el autocuidado siguiendo los lineamientos para evitar el contagio durante la apertura gradual de las actividades en restaurantes, transporte, comercio y templos.
El Puesto de Mando Unificado mantuvo el pico y cédula para ir a los establecimientos de comercio en la segunda ciudad del departamento.
En la plaza de mercado se extremaron las disposiciones y el Escuadrón Móvil anti-COVID-19 estará pendiente de los lineamientos trazados por el Gobierno Nacional.
Las empresas transportadoras tienen listos los protocolos para prender los motores y reanudar el servicio intermunicipal.
El gremio espera la recuperación económica luego de seis meses de parálisis, indicó el gerente de Cootransunidos, Román Jácome.
La diócesis de Ocaña anunció que el próximo domingo se abren las puertas de los templos. Los fieles pueden inscribirse en las plataformas digitales y el aforo no puede ser superior a los cincuenta, precisó el sacerdote Jairo López