Niños de los sectores más apartados de Pamplona asisten de lunes a viernes a la Biblioteca Municipal Jorge Gaitán Durán y Eduardo Cote Lamus a recibir asesoría de tareas.
Sin importarles las distancias o las condiciones climáticas están puntuales a las 2 de la tarde en el parque recreacional San Fermín, en donde queda la biblioteca que también ofrece el servicio de internet.
En general son estudiantes de las instituciones públicas del municipio que por las ocupaciones de los padres de familia acuden en búsqueda de asesoría.
La bibliotecaria, María Gloria Burgos Mendoza, aseguró que esta es una manera de ayudarlos a que mejoren el rendimiento académico y sean personas comprometidas con sus responsabilidades escolares.
Al frente de las asesorías están tres estudiantes de pedagogía de la Universidad de Pamplona, quienes adelantan las prácticas profesionales en la Biblioteca Municipal.
Las actividades duran cuatro horas y las alternan con talleres de escritura y de lectura para que complementen el aprendizaje.
Esta enseñanza está a cargo de Burgos, quien las alterna con las demás atenciones de los usuarios que frecuentemente asisten al inmueble.
En los talleres y en horarios distintos, igualmente participan niños de los jardines infantiles del Bienestar Familiar, personas de la tercera edad y discapacitados. El ejercicio consiste en leer cuentos infantiles enfocados al cuidado y bienestar de las familias.
Los adultos según la encargada de la dirección de la biblioteca, participan en narraciones de mitos y de leyendas, en donde a su vez intercambian experiencias sobre vivencias y hechos del pasado.
La bibliotecaria explicó que los sábados tiene programado el Cine Club de 9 de la mañana a 12 del mediodía, en donde se les proyectan películas infantiles y de motivación.
Burgos manifestó que en lo corrido del año han atendido a 4.000 usuarios en donde algunos acceden a préstamos de computadores, consulta de libros, textos y de otras publicaciones especializadas.
La labor
La estudiante de tercer semestre de pedagogía infantil, Leidy Paola Carvajal, manifestó que después de que los niños terminan de hacer las tareas, los llevan a las zonas verdes para que se integren a través de actividades recreativas y juegos.
“Los ayudamos con las asesorías para que desarrollen mejor los contenidos. Al igual que entiendan, de acuerdo con sus edades, la importancia de formarse”, dijo.
Para las universitarias este convenio con la biblioteca les permite adquirir experiencia y aumentar los conocimientos para un mejor desempeño laboral.