La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Pamplona
Casa Chirimoya, germen de cultura en Pamplona
El inmueble recuperado en el barrio San Agustín fue convertido en un espacio para el arte.
Image
La opinión
La Opinión
Jueves, 12 de Octubre de 2017

Hace cuatro meses era una casona  antigua y descuidada, por la falta de mantenimiento. Hoy, está convertida en un centro de saberes en donde afloran la cultura, la vida y el cuidado de la naturaleza.

El inmueble, localizado en el barrio San Agustín, sobre la carretera a Bucaramanga, fue recuperado.

El nuevo centro en donde concurren las manifestaciones del arte lleva por nombre Casa Chirimoya.

De acuerdo con el gestor del proyecto, Leonardo José Parra Mariño, con esa designación le hace honor a la cultura indígena quechua que tenía esa fruta entre la dieta alimenticia (chiri, frío y muya, semilla).

Es por eso que al volver a Pamplona, donde nació Parra, gestó el proyecto buscando con ello crear un espacio libre en donde se promueva el cambio de conciencia y el respeto por los recursos naturales.

El grupo trabaja en mejorar los estilos de vida saludable a través de la soberanía alimentaria, la expresión artística como elemento sanador, las prácticas de economía solidaria y el altruismo.

Considera que si estos elementos se llevan de una manera juiciosa, pueden contribuir a que los humanos logren un buen vivir.

Parra, quien por varios años recorrió América del Sur y después vivió en Medellín, logró reafirmar todos esos conocimientos e ideas que adquirió de otras culturas latinoamericanas.

Es por eso que quiso volver a su tierra para materializarlas en un espacio que le diera cabida a las expresiones artísticas.

En la actualidad cuenta con el respaldo de docentes universitarios, estudiantes, gestores sociales, comunales y amas de casa.

En Chirimoya diariamente se producen encuentros de meditación, yoga, cine infantil, lectura, talleres sobre manejo de residuos orgánicos y de cocina tradicional enfocada a los buenos hábitos alimenticios.

También se promueve la estrategia de intercambio gratuito de elementos, libros, ropa y otros bienes que sean útiles a las demás personas.

Otro de los servicios que se ofrece en el inmueble es el de hostal para quienes lleguen a compartir sus experiencias y con los pamploneses.

Parra agregó que el propósito fundamental es formar a las personas, sin que quienes participan tengan que pagar por aprender. En tres meses de funcionar el proyecto ha beneficiado a 300 personas.

Temas del Día