En los últimos días, la Policía intensificó los planes de vigilancia y requisa para controlar la distribución y el consumo de drogas en Pamplona.

En los dos últimos años se ha incrementado este fenómeno, pese a campañas educativas, decomisos y capturas que hacen las autoridades locales.

De acuerdo con el mando institucional y buscando reducir este fenómeno que está ligado a todo tipo de violencia, el comando del Primer Distrito de Policía redobló las acciones de control en barrios, parques y sectores que han sido tomados por los consumidores.

El comandante de la Policía, Juan Fernando Díaz Quintero, expresó que en las primeras intervenciones en los barrios Santa Marta y Cristo Rey, Plazuela Almeyda, parque principal y otros sectores del municipio, decomisaron 38 armas blancas, 70 pipas artesanales para el consumo de estupefacientes, 10 trituradoras y 30 gramos de marihuana.

En estos sectores según las estadísticas que maneja la Policía, se presentan los mayores casos relacionados con el tráfico, consumo de drogas, lesiones personales y hurtos.

El oficial igualmente dijo que a la par de estas acciones se aplica el nuevo Código de Policía. 

El personal de prevención y educación hace charlas frecuentes sobre cómo motivar a las comunidades para que denuncien. “Estamos trabajando por buenos resultados”.

El comandante Díaz expresó que cuando detectan a una persona con una dosis mínima y no colabora con los requerimientos, se le aplica el Código de Policía.

Desde que se presentó la muerte, a cuchillo, del estudiante de ingeniería civil de la Universidad de Pamplona, por petición de la comunidad, la Dirección Nacional de la Policía y el Comando de Norte de Santander a cargo del coronel, George Quintero, aumentaron el pie de fuerza del municipio.