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Política
10 características del nuevo Congreso de la República
El 20 de julio tomará las riendas del Legislativo.
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Colprensa
Colprensa
Sábado, 17 de Marzo de 2018

El 20 de julio, un nuevo grupo de congresistas tomará las riendas del Legislativo por los próximos cuatro años. Se trata de un Congreso muy distinto al saliente: por un lado, habrá nuevas curules en la corporación, diez de ellas para los miembros de la desmovilizada guerrilla de las Farc; por otro lado, las cargas de poder político cambiaron dando más representación a partidos como el Centro Democrático, Cambio Radical y la Alianza Verde.  

Pero son muchas más las características de este nuevo Congreso, del cual dependerá -entre otras cosas- buena parte de la gobernabilidad que tendrá el próximo presidente de la República. 

Las siguientes son algunas de las particularidades que tendrán el nuevo Senado y la Cámara:

Prima la derecha

Los resultados de las elecciones dejaron para el país un Congreso mayoritario de derecha, representada en los partidos Centro Democrático, Cambio Radical y Conservador, los cuales tendrán 133 curules en el Senado y la Cámara de Representantes, el 47 por ciento de las sillas que tiene el Legislativo. No obstante, otras fuerzas alternativas ganaron espacio dentro del recinto.

Ganó fuerza la centro izquierda

Una de las sorpresas que dejaron las elecciones legislativas fue que sectores de centro izquierda aumentaron su presencia en el Congreso ganando varias curules, con las que podrían conformar una coalición y ser importantes en las votaciones de los proyectos.

“Hay que hacer énfasis en la votación del Polo Democrático y la Alianza Verde. En el primero, se ve un fraccionamiento de una posición ideológica de centro izquierda e izquierda, en donde muchos de ellos se fueron a la lista de Decentes. Por el lado de los verdes, la presencia de Antanas Mockus jalonó muchísimo a los votantes indecisos que son opinión en el país, un voto mucho más cualificado y urbano, principalmente en el caso de Bogotá”, explicó el docente de la maestría en Comunicación Política de la Universidad Externado, Carlos Andrés Arias.

Más de tres millones de votos en blanco, nulos y no marcados

A pesar del aumento de la participación en estas elecciones, los votos en blanco, nulos y no marcados tuvieron un consolidado de cerca de 3 millones, lo cual reflejaría el rechazo de la ciudadanía en las urnas o simplemente evidenciaría la falta de pedagogía electoral para el desarrollo de unos comicios en donde el gran número de aspirantes puede confundir al elector.

Un congreso con más votos

Las elecciones legislativas de este domingo registraron un incremento en la votación, frente a las de hace cuatro años. Según los analistas, las consultas interpartidistas pudieron haber jalonado la participación de los ciudadanos en estos comicios.

El analista político Javier Torres resaltó que las consultas “tienen mucha más publicidad y recordación en los medios de comunicación, son más digeribles y tienen menos candidatos. Por eso, muchas personas pudieron acercarse a las consultas y por defecto votar por Senado y Cámara, cuando hay un desinterés y conocimiento político”.  

El voto castigo no se sintió

Con todos los escándalos de corrupción que se han venido presentando con algunos políticos en los últimos años, se esperaba que los ciudadanos ejercieran un voto castigo contra los candidatos que pertenecen, familiarmente o políticamente, a estructuras corruptas o que tienen cuentas pendientes con la justicia, sin embargo, eso no se dio del todo.

Si bien nuevas fuerzas políticas como la Alianza Verde y la Lista de la Decencia se hicieron sentir y mientras que la una aumentó su representación en el Congreso, la  segunda se estrenó con una muy buena votación, lo que le permitió hacerse acreedora a cuatro curules, hay algunos dirigentes cuestionados que siguen teniendo un gran poder electoral que les garantiza su reelección.

Caras nuevas, pero...

Los analistas consideran que al nuevo Congreso llegarán caras nuevas, principalmente de jóvenes o académicos que representan una renovación en el Legislativo. Sin embargo, también resaltaron que algunos son ‘delfines’ o cercanos a estructuras políticas cuestionadas.

El subdirector de la Fundación paz y Reconciliación, Ariel Ávila, señaló que “puede que sean caras nuevas, pero algunos son herederos de estructuras vinculadas a la corrupción y a la criminalidad, como es el caso de John Besaile, hermano de Musa Besaile. Sin embargo, sí llegaron caras nuevas como Antanas Mockus o Juanita Gobertus, que representan una verdadera renovación”.

Desde 1991 no se reducía tanto el abstencionismo

A pesar de que el abstencionismo en la más reciente jornada democrática fue del 51,2%, desde 1991 no se veía una participación tan alta en las urnas por parte de los colombianos. 

“Si bien la abstención sigue y seguirá siendo importante, las elecciones legislativas nos muestran que al haber pasado 50 años de conflicto armado y al haber llegado a una etapa de posconflicto, se ha generado un sentimiento de esperanza y cultura democrática en los colombianos, y eso se evidencia en que en muchas zonas afectadas no se presentó ningún tipo de circunstancia que alterara el proceso electoral haciendo que la gente saliera a votar con mayor tranquilidad”, señaló el profesor Carlos Arias.

Mujeres no lograron aumentar su representación

La Registraduría Nacional informó que en estas elecciones se presentó un aumento en el número de las candidatas al Congreso de la República, al pasar de 760 aspirantes en 2014, a 943 en 2018. Sin embargo, este incremento no representó más curules para las mujeres en el Senado y la Cámara, perdiendo un escaño en cada corporación.

“Aunque se han manejado muchas iniciativas desde lo público para que la mujer tenga cada vez más participación en los entes decisorios, lo que se observa es que aún hay muchas restricciones en términos de la asignación de curules”, consideró la analista política Viviana Clavijo.

Integrantes cuestionados 

Estas elecciones también dejaron algunos congresistas elegidos que tienen serios cuestionamientos por sus lazos familiares o políticos, o por tener procesos pendientes con la justicia. 

La analista política Viviana Clavijo consideró que estas estructuras siguen funcionando en las regiones debido a que sus familias o estructuras políticas han conformado una serie de estrategias que responden a ciertas necesidades de los ciudadanos que no son satisfechas por el Estado.

Las maquinarias no funcionaron a fondo

Otra de las características que se pudo percibir en estos nuevos comicios, es que las maquinarias políticas que hay en varias regiones del país no funcionaron a fondo. Esto quedó demostrado luego de que varios de los candidatos fuertes se ‘quemaron’ en su aspiración para llegar al Congreso de la República.

Ariel Ávila señaló que en estas elecciones se lograron algunas cosas importantes: “la candidata Olga Suárez Mira se quemó, la gente de Bernardo ‘Ñoño’ Elías no logró la curul, Ángel Custodio Cabrera, que era el candidato de Plinio Olano, tampoco pasó. Por eso, creo que hubo avances, pero en todo caso la campaña para que los candidatos cuestionados no lleguen al Congreso tiene que seguir”.

En Norte de Santander, también se dio el caso de los senadores Manuel Guillermo Mora y Juan Manuel Corzo, quienes a pesar de su larga trayectoria en el Congreso y de tener asegurada una estructura política de años en el departamento, en esta oportunidad el engranaje de sus maquinarias no les alcanzó para renovar su credencial para el periodo 2018-2022.

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