Sin titubeos y con el mismo ímpetu que la caracteriza desde que entró a hacer parte del terreno político colombiano, como aliada del uribismo, la senadora Paloma Valencia insiste en que el Gobierno “está convirtiendo a Colombia en un sistema en donde ser pillo paga”.

Por esa razón, como lo vienen haciendo varios de sus compañeros de Congreso y fieles escuderos del expresidente Álvaro Uribe Vélez en el país, la dirigente decidió trasladarse a Cúcuta este fin de semana, para acompañar el proceso de recolección de firmas, mediante el cual buscan dejar en evidencia el rechazo que existe frente a los acuerdos de La Habana.

Asegura que esta campaña hace parte del proceso de resistencia civil que convocó hace varias semanas el también senador, como una manifestación “simbólica, pacífica y argumentada” con la que buscan llamar la atención sobre la verdadera paz que quiere Colombia.

“El Gobierno considera que entregarle impunidad y representación política a las Farc, igualar a las Fuerzas Armadas con el terrorismo y fundar una nueva justicia le van a aportar a la paz. Pero hay ciudadanos que consideramos que estas prebendas no van a traer más paz, sino todo lo contrario, nuevas formas de violencia y por eso estamos en la campaña de resistencia civil, para proponer la paz que queremos y convocar a la ciudadanía a hacer estas exigencias y a demandar el Acto Legislativo para la Paz”, manifestó Valencia.

Considera que el presidente Juan Manuel Santos ha venido confundiendo la firma de los acuerdos de La Habana con la paz, cuando estas son cosas completamente distintas.

“Si esto fuera cierto, Colombia ya estaría en paz, pues con este cese unilateral ya no habría ningún hecho de violencia en el país, pero hoy es todo lo contrario. La impunidad es lo que ha incentivado nuevas violencias”, cree Valencia.

Para sustentar su afirmación, la congresista trajo a colación la transformación que ha tenido el Eln desde el año pasado, cuando parecía una guerrilla diezmada y de un momento a otro comenzó a imponer su accionar violento, mientras exploraba la posibilidad de iniciar unos diálogos de paz.

“Estos son temas que ponen de presente que el lenguaje al que está invitando el Gobierno es: ‘ejerza violencia que yo le voy a dar premios e impunidad’. Ese no es el camino a la paz. Lo que se está haciendo es reproduciendo estilos de violencia”, insiste.

Aclara que los colombianos que se han unido al proceso de recolección de firmas lo han hecho por voluntad propia y porque comparten la idea de que la paz que está proponiendo Santos es una “paz con impunidad”.

Santos contraataca

Por primera vez desde que comenzó el proceso de recolección de firmas del uribismo, el presidente Juan Manuel Santos se refirió a la iniciativa con la que la oposición busca hacerle frente al inminente acuerdo de paz con las Farc.

“¿Ustedes quieren que las Farc desaparezcan? ¿Quieren que terminemos la guerra?, eso es lo que quiere el pueblo colombiano, por eso me río cuando algunos se van por ahí recogiendo unas firmas para que la guerra continúe y para que las víctimas continúen porque la guerra es una fábrica de víctimas y llevamos 8 millones de víctimas y ¡no quiero más víctimas ni más hijos de la guerra!”, manifestó el jefe de Estado durante un acto en Barranquilla.

Insistió en que cuando se termine la negociación van a quedar muy pocos tratando de decirle no a la paz, porque los colombianos se van a dar cuenta de que los acuerdos son sensatos y que no se le está entregando el país al comunismo, ni a las Farc.

La Opinión