La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Política
‘Las víctimas somos las que entendemos lo que significa el fin del conflicto'
Yolanda Pinto de Gaviria, esposa del gobernador de Antioquia, asesinado por las Farc es ahora la directora de la Unidad de Víctimas.
Image
Colprensa
Colprensa
Sábado, 2 de Septiembre de 2017

A Yolanda Pinto de Gaviria el país la recuerda por las imágenes de dolor que se captaron en 2003 cuando Colombia recibió la noticia del asesinato, a manos de las Farc, del gobernador de Antioquia, Guillermo Gaviria Correa, su esposo. 

Ella, como miles de personas, es una clara representación del dolor que el conflicto interno ha causado por más de cinco décadas.

Desde hace algunos días, esta santandereana, con un dejo claramente antioqueño, llegó a la Dirección de la Unidad de Víctimas, para reemplazar a Alan Jara, otra víctima de la guerra con las Farc.

Además de contar con experiencia en la función pública, pues fue la encargada de la transformación del antiguo Ministerio de Obras Públicas en Ministerio de Transporte y de poner en marcha el Instituto Nacional de Vías, Yolanda Pinto llegó a esta entidad con la tranquilidad de no guardar rencor por nadie, lo que, dice, le ha permitido vivir y ser feliz, por lo menos en la medida de lo posible, pues aún se percibe en ella el vacío por no tener a su esposo, a quien rememora constantemente.

¿Cómo han recibido las víctimas su llegada a la Unidad?

He recibido mucho apoyo. Ellos tienen la esperanza de que yo pueda seguir trabajando por ellas.

¿Qué lectura le da usted al conflicto y a sus consecuencias para el país?

Tengo la suerte de que a mí el conflicto y el dolor, que lo tengo intacto en el corazón, no me generó odio ni rencor ni deseos de venganza con nadie.

Usted es una víctima de las Farc. Tras 15 años de su tragedia, ¿cómo ha manejado la ausencia de su esposo y todo lo que ha sido el proceso de paz?

Por supuesto, soy víctima del conflicto, pero soy una bendecida pues no he dejado entrar en mi corazón todas esas cosas, los malos sentimientos, por eso he podido vivir.

¿Qué siente una víctima al asumir las riendas de una entidad cuya función es atender a otras personas que también han sufrido los rigores del conflicto?

El conflicto nos genera muchas frustraciones, nos aplasta, nos causa mucho daño. Yo me siento muy agradecida con Dios y con el presidente de la República por darme la oportunidad de trabajar con mi familia, la familia de las víctimas de un conflicto tan injusto como el que hemos vivido.

¿Y qué siente al poder darles respuestas y soluciones a otras víctimas?

Me da mucha alegría poder pensar en ayudar a las víctimas para que puedan salir adelante, para que puedan tener la posibilidad de volver a ser, de volver a vivir. Esta es la oportunidad de sentarme con víctimas y buscar caminos para que, junto a ellas, poder ayudarles a salir adelante.

Usted dice que el conflicto no le ha generado odios, ¿cómo se logra esto, a pesar de su historia?

Eso es una fortaleza de algunas personas. Cuando mataron a Guillermo, y en medio de todo el dolor, yo rechazaba el que tuviera que vivir en un infierno, pues estar sin él era todo un infierno. Pero uno no puede estar pensando todos los días en cómo cobrar lo que me hicieron. Mientras enterraba a Guillermo pensaba en que el odio y el dolor no podía dominarme, pues tenía unos hijos por quienes velar, y por quienes salir adelante. Hay muchas víctimas que seguramente, como yo, no han dejado entrar el odio a su corazón.

¿Qué conserva de su esposo y qué le gustaría aplicar ahora como directora de la Unidad de Víctimas?

De Guillermo tengo un legado y es el de seguir luchando por buscar la paz en Colombia, y eso haré. Por tener el dolor vivo, aún después de 15 años, me es posible sentarme con las víctimas para ayudarles a encontrar un camino para salir adelante. En estos 15 años desde que me quitaron a Guillermo, me he encontrado con muchas víctimas con quienes es claro que tenemos una identidad y es el mismo dolor. No hay duda que el dolor nos une.

¿Cómo ve hoy a las Farc. Confía en su apuesta por la paz?

Las Farc como grupo armado se acabaron. Hay que ver que en tan solo dos años hemos evitado la muerte de casi tres mil personas. Eso es un hecho tangible. Espero que los resultados que se han visto permitan que muchos colombianos acojamos el proceso. En estos dos años no ha habido la destrucción que se venía dando antes. Esto no puede ser entendido como una cosa menor.

Las tareas pendientes

Llega a la Unidad en momentos en que arranca el proceso de alcanzar la verdadera paz. ¿Se tienen los recursos suficientes para cumplir las exigencias de esta coyuntura?

Esta es una entidad muy importante para el momento que está viviendo Colombia. Debemos seguir buscando los recursos para reparar el mayor número de víctimas posible.  

¿Cuáles son sus planes al frente de la entidad?

Quiero fortalecer las acciones sicosociales en bien de las víctimas, porque cuando una persona recupera su autoestima, su dignidad y su confianza, es una persona que seguirá creciendo, podrá avanzar en su vida y seguro encontrará caminos de recuperación. Además, seguiremos con las acciones de rehabilitación y reparación económica; seguiremos trabajando con el apoyo de proyectos productivos que les permitan tener una estructura económica. Mi idea es que los recursos sean los mayores posibles para indemnizar y reparar.

¿A dónde mira para acceder a esos recursos que puedan complementar las ayudas?

Una de las alternativas es el fondo de bienes de Justicia y Paz. Ahí tenemos multas que se les han causado a muchos condenados y que suman 4 billones de pesos, los cuales están en la obligación de pagar y nosotros de cobrarlos. A esto se suma el importante número de bienes que debemos monetizar.

¿Qué se puede hacer en tan solo un año que le queda al gobierno Santos?

Un año parece poco, pero es muy importante y valioso si logramos fortalecer las tareas de las que le he hablado. Esta es una entidad que camina aceleradamente y lo que toca es asumir las acciones que sean necesarias, al igual que aportar para mejorar.

¿Cuál tarea empezará a cumplir ya?

Quiero adentrarme en un punto que es un ‘Talón de Aquiles’ en la entidad. Es el proceso de contratación, ahí hay que hacer una reingeniería para poder adelantar las acciones con mayor agilidad. En este tema tenemos un trancón. Tenemos que trabajar intensamente en el cierre y punto final de muchas reparaciones en sujetos colectivos de reparación. Este año deben cerrarse muchos de estos casos, pues llevan mucho años en implementación, y debemos ponerles punto final.

¿De cuántos grupos se habla?

Son poco más de 500 sujetos colectivos de reparación. De estos, alrededor de 300 son étnicos. Sujetos colectivos son poblaciones completas afectadas con quienes se adelanta algún tipo de plan.

¿Va a haber una nueva estrategia para cubrir a un mayor número de víctimas?

Sí, de eso se trata. Hemos indemnizado 700.000 víctimas, pero tenemos que llegar a cumplir la meta del Plan Nacional de Desarrollo y llegar a un millón de víctimas, en indemnización  individual.

¿Le preocupa lo que pase después del 7 de agosto de 2018, cuando se instale un nuevo Gobierno?

Tengo la ilusión de que los colombianos pensemos bien, de que las víctimas nos convirtamos en las defensoras del acuerdo de paz, pues somos quienes de verdad entendemos lo que significa el fin del conflicto.'

Temas del Día