El primer gran encuentro de los nuevos gobernadores del país con el Gobierno Nacional, que tendrá lugar entre jueves y viernes de esta semana en Cartagena, servirá para que los mandatarios se acojan al pacto para despolitizar el sector salud.
Este acuerdo propuesto por el presidente de la República, Iván Duque, está fundamentado en dos aspectos: lograr un mecanismo pronto y concreto para el pago de las deudas a los hospitales y despejar cualquier asomo de politización en la designación de los 931 gerentes que se tendrán que elegir el próximo mes.
El director Ejecutivo de la Federación Nacional de Departamentos (FND), Carlos Camargo Assis, aseguró que la Federación acogió el llamado del Gobierno Nacional y por esa razón trabajarán en conjunto con los 32 gobernadores, en el proceso de elección de los nuevos titulares de los hospitales públicos.
Camargo recordó que en total son 25 centros médicos de segundo y tercer nivel, y aproximadamente 112 de mediana complejidad.
Precisó que tanto el presidente de la República, como el Ministerio de Salud y la FND quieren apostarle a garantizar que los próximos gerentes sean personas idóneas, preparadas y líderes que trabajen por mejorar la calidad en la prestación de los servicios de salud a los colombianos.
Acuerdo de punto final
Adicionalmente, la Federación, por intermedio de los secretarios departamentales de Salud, se comprometió a tener listos para septiembre todos los trámites que garanticen los pagos de las deudas del sector salud con respecto al Acuerdo de Punto Final, una medida que se adoptó por parte del Gobierno para aliviar estructuralmente los problemas del sector, hacerlo sostenible y fortalecerlo.
“Los secretarios de Salud departamentales se comprometieron a priorizar en su agenda de trabajo la implementación del Acuerdo de Punto Final, con el propósito de acelerar los giros y auditorías para dejar en cero las deudas acumuladas que históricamente tienen los departamentos y la Nación”, indicó el director de la FND.
En el caso del Hospital Erasmo Meoz, de Cúcuta, su gerente, Juan Agustín Ramírez, dijo recientemente en una entrevista a La Opinión, que en los últimos años han atendido a unos 36.000 venezolanos por un costo de $79.000 millones, de los cuales se han cancelado $27.000 millones y están pendientes por girar $ 52.000 millones.
“Esto ha representado una carga bastante pesada para el Hospital, debido a que no se cuenta con recursos que pudieran destinarse a esa emergencia”, reconoció.
