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Suerte de excomandantes de las Farc la decidirá la JEP

Para que reporten su situación dentro del programa de reinserción y definir así su futuro en la justicia transicional.

Ya son varios días y semanas que no se sabe nada de tres importantes hombres de la desaparecida guerrilla de las Farc, lo que le ha sumado un nuevo ingrediente al ambiente de incertidumbre y tensión en que se encuentra el proceso de implementación del acuerdo de paz de La Habana.

Luciano Marín Arango, más conocido como Iván Márquez; Hernán Darío Velásquez, El Paisa, y Henry Castellanos Garzón, Romaña, resolvieron abandonar sus esquemas de seguridad y tomaron rumbos desconocidos, según lo confirmó la propia Misión de Verificación de la ONU.

Hasta el momento, muchas versiones se han planteado alrededor de estas desapariciones, desde posibles acercamientos con disidentes de las Farc, hasta supuestas órdenes de captura en contra de los exsubversivos que motivaron su deserción. Frente a esta última posibilidad, el mismo fiscal general de la Nación, Néstor Humberto Martínez, ya salió a  desmentir dichos señalamientos al asegurar categóricamente que con “la paz no se juega”. 

No es cierto que haya una orden de detención con fines de extradición contra Iván Márquez, no la posee el fiscal General. No es cierto que por virtud de una orden de captura que habría librado la Fiscalía General de la Nación, el señor Márquez tuvo que salir del espacio territorial donde estaba, tampoco es cierto que una hora después de haber abandonado el sitio, el Ejército Nacional llegó a hacer efectiva esa captura”, aseguró el jefe del organismo investigador.

Lo cierto es que, desde el plano jurídico y según los compromisos que se establecieron en el proceso de paz,  únicamente la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) podrá requerir a Márquez, Romaña y El Paisa para que reporten su situación dentro del programa de reinserción y definir así su futuro en la justicia transicional.

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De hecho, el pasado jueves la presidenta de ese tribunal, Patricia Linares, notificó no solo a los tres excomandantes guerrilleros, sino a otros 28 más, para que en un plazo no superior a 10 días entreguen un informe en el que detallen las actividades que están adelantando dentro del proceso de reincorporación y manifiesten su verdadero compromiso con lo que se pactó.

De no hacerlo, la JEP podría llevarlos a una audiencia de condicionalidad para determinar si hay incumplimientos y tomar decisiones frente a cada caso.

¿Qué podría pasar en la JEP?

Para el penalista Francisco Bernate, en este momento del proceso, jurídicamente la ausencia de Iván Márquez y los demás reinsertados no tiene “mayor incidencia”, porque la JEP no los ha requerido de manera presencial y estos pueden comparecer por medio de sus abogados, como ocurrió en la primera diligencia que se llevó a cabo en dicho tribunal.

El penalista aseguró que en este momento la Fiscalía General de la Nación “no puede meterse a requerir a los reinsertados, a menos que se establezca que volvieron a delinquir posterior a la firma de los acuerdos de paz”. En ese sentido, el abogado consideró que la “evasión” de Márquez tiene más un tinte político que se desprende desde el Gobierno Nacional.

En relación con las órdenes de captura que se podrían emitir, Bernate consideró que el Estado colombiano puede determinar hacerlas efectivas, sin embargo, en este caso se estaría rompiendo el proceso de paz, debido a que hay un decreto de por medio. 

Por otro lado, el también penalista Juan Francisco Navarrete consideró que si Iván Márquez, El Paisa y Romaña no comparecen ante la JEP cuando sean requeridos, la Fiscalía tendría la potestad de llamarlos por medio de la justicia ordinaria, esto debido a que no testificaron ni se acogieron a los lineamientos que brinda la justicia transicional, que no es otra cosa que aceptar su responsabilidad en los hechos ocurridos en el marco del conflicto armado.

Fuentes de la JEP confirmaron que los exguerrilleros han comparecido ante el tribunal por medio de sus abogados defensores, por lo que no hay una fecha límite en la que deban presentarse. Un caso diferente sería si son requeridos en un proceso judicial donde deben obligatoriamente hacer presencia física e incumplen. Solo, hasta ese momento, el tribunal se pronunciaría, dijeron.

Incertidumbre para la paz

Si bien hasta el momento la desaparición de los excomandantes de las Farc no afecta todavía su continuidad dentro de la implementación, políticamente el golpe que está recibiendo el proceso de paz es mayor. 

En ese sentido, el senador del Partido Liberal, Horacio José Serpa, aseguró que desconocer el paradero de los exsubversivos es muy grave. “No se sabe la razón por la cual no están presentes en el proceso, y eso es enteramente necesario, como es necesario sacar todos los acuerdos de paz a flote. Soy de los colombianos que estamos muy preocupados y de los que pedimos a las autoridades mayor prudencia para que lo acordado con la Farc y aprobado por el Congreso de la República se cumpla adecuadamente”, dijo.

Para el congresista, si bien es cierto que los exsubversivos deben comparecer ante la JEP, el acuerdo fue hecho con el Gobierno Nacional, por lo que todas las autoridades deben tener una idea sobre el paradero de los desmovilizados. “Pienso que en el Congreso deben hacer un debate de control político, para que no se vaya a desbaratar el esfuerzo de conseguir la paz”.

Iván Cepeda, senador del Polo Democrático y acérrimo defensor del proceso de paz, admitió que, sin duda, la ausencia de Márquez y los demás es una situación de incertidumbre que hay que resolver lo antes posible. “Ahora no hay ninguna evidencia de que estas personas estén delinquiendo o estén fuera del proceso de paz, pero sí es importante que se haga claridad al país sobre su situación actual”, dijo.

No obstante que el caso de los exlíderes de las Farc es preocupante, el dirigente de izquierda recordó que en este momento los exguerrilleros se pueden mover por el territorio nacional sin ninguna objeción. “Ahora pueden circular libremente, pero si hay un requerimiento de la JEP, sí es necesario que tengan que hacer presencia con sus abogados. Por ahora, lo importante es establecer dónde están, en qué situación y desde esa perspectiva tomar decisiones”, consideró Cepeda.

La pista de su ubicación podría llegar con el informe que en 10 días tendrán que entregar los llamados por la JEP, en el cual, de presentarlo, dará luces sobre lo que piensan Márquez, El Paisa y Romaña de su futuro en el proceso de reinserción a la vida civil.

¿Quiénes son los desaparecidos?

Henry Castellanos Garzón, Romaña

Fue miembro del Estado Mayor Conjunto de las Farc y comandante del bloque Oriental y el frente 53. Se vinculó a la guerrilla a finales de los 80. Su protagonismo en la agrupación lo adquirió con las llamadas ‘pescas milagrosas’.

Su nombre también ha sonado, recientemente, alrededor de la investigación de la Fiscalía contra Alirio, Uriel, Edna y Norberto Mora Urrea, los hermanos que, al parecer, habían dado apariencia de legalidad a los dineros que Romaña les entregaba, producto de su actuar delictivo mientras hizo parte del frente 53.

Recientemente, sin embargo, el fiscal general de la Nación lo mostró ante el Congreso de la República como un “agricultor” y líder de los proyectos productivos del posconflicto.

Hernán Darío Velásquez, El Paisa

Fue el primero en abandonar su esquema de seguridad. En su momento, Diego Mora, director de la UNP, anunció que el exsubversivo expresó por medio escrito que no deseaba tener consigo los escoltas y el vehículo que le fue adjudicado una vez se firmó el acuerdo de paz.

El Paisa, quien fue jefe de la columna móvil Teófilo Forero de las desmovilizadas Farc, participó activamente en la mesa de negociación de La Habana.

Según las autoridades, el exmilitante fue el responsable del secuestro de los diputados del Valle y del atentado al Club El Nogal, ocurrido en febrero de 2003, y donde perdieron la vida 36 personas y 198 más resultaron heridas.

Del mismo modo, es responsable de la toma del edificio Miraflores, donde secuestraron a la excongresista Gloria Polanco de Lozada y sus hijos Jaime Felipe y Juan Sebastián Lozada Polanco. 

Luciano Marín, Iván Márquez

Políticamente hablando, Iván Márquez era uno de los hombres más importantes de las Farc. Ese protagonismo lo mantuvo tras la creación del partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC). Sin embargo, tras la captura de Jesús Santrich, por supuesto narcotráfico, Márquez decidió refugiarse en el Espacio Territorial de Miravalle (Caquetá) y no aceptó la curul a la que se había hecho acreedor en el Senado. 

Aunque se desconocen las razones por las cuales decidió marginarse, se sabe que el excomandante guerrillero es familiar de uno de los involucrados en el caso Santrich, Marlon Marín Marín, su sobrino, y quien está en este momento en Estados Unidos colaborando con la justicia.

De Márquez no se sabe su paradero desde hace un poco más de 15 días y aunque en este momento las autoridades no tienen certeza de que haya vuelto a delinquir, el Ejército Nacional ha establecido “un cuadrante” del lugar por donde se puede estar movilizando.

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Sábado, 15 de Septiembre de 2018
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