~ Según la Unidad Nacional de Protección (UNP), el año pasado brindó seguridad a 621 defensores de Derechos Humanos que se encontraban amenazados de muerte en el país. No obstante, 78 fueron asesinados, incluyendo algunos de los que contaban con esquemas de protección.~
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Según la Unidad Nacional de Protección (UNP), el año pasado brindó
seguridad a 621 defensores de Derechos Humanos que se encontraban
amenazados de muerte en el país. No obstante, 78 fueron asesinados,
incluyendo algunos de los que contaban con esquemas de protección.~
Según la Unidad Nacional de Protección (UNP), el año pasado brindó seguridad a 621 defensores de Derechos Humanos que se encontraban amenazados de muerte en el país. No obstante, 78 fueron asesinados, incluyendo algunos de los que contaban con esquemas de protección.
Para el primer semestre de este año, la cifra de defensores asesinados llegó a 30, presentándose una disminución de 7 homicidios con relación al mismo lapso de tiempo del año anterior. De estos 30 defensores asesinados, 3 de ellos contaban con esquemas de seguridad ofrecidos por la UNP.
En Norte de Santander, según el Sistema de Información sobre Agresiones contra Defensores de Derechos Humanos del Programa No Gubernamental ‘Somos Defensores’, han sido asesinados en lo corrido del año dos líderes dedicados a la defensa de las víctimas: Duvis Antonio Galvis, muerto en Sardinata el 26 de enero de 2014 y quien pertenecía a la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat), y Douglas Zuluaga, asesinado en Convención el 10 de abril de 2014, miembro de la Junta de Acción Comunal de la vereda Cartagenita. En ambos casos se desconoce quién los asesinó.
Y es que, según las cifras entregadas por la organización Somos Defensores, durante los primeros seis meses de 2014, 194 defensores fueron víctimas de algún tipo de agresión que puso en riesgo su vida e integridad y obstaculizó su labor de defensa de los derechos humanos en Colombia.
En el primer semestre, el mayor número de casos registrados se presentó en enero con 49 agresiones y mayo con 38; luego están los meses de febrero, marzo y abril con 28 agresiones, y finalmente junio con 23.
Con relación a las agresiones por sexo, se tiene que de los 194 defensores agredidos entre enero y junio de 2014, el 81% fueron hombres y el 19% mujeres.
Esta organización, a su vez, ha identificado siete tipos de agresión contra defensores: asesinatos, atentados, amenazas, detenciones arbitrarias, uso arbitrario del sistema penal, desaparición y robo de información.
Los 30 defensores asesinados en los primeros 6 meses del año han sido hombres. Los dos departamentos más golpeados por estos hechos son Cauca y Valle del Cauca con 4 líderes asesinados cada uno. Les siguen Bogotá y Atlántico con 3; Putumayo, Magdalena y Norte de Santander con 2; y Antioquia, Bolívar, Caquetá, Casanare, Chocó, Huila, Nariño, Risaralda y Santander con 1 homicidio cada uno.
De los 30 defensores asesinados, 18 habían denunciado amenazas. En 4 de estos 18 casos, sus muertes se dieron entre 24 y 48 horas después de haber aparecido sus nombres en un panfleto amenazante. De los 30 homicidios, 24 de ellos fueron cometidos con armas de fuego, 3 con arma blanca y 3 con objetos contundentes.
Los líderes y defensores con mayor número de asesinatos fueron los líderes comunales (8 casos), campesinos (7 casos), e indígenas (6 casos).
Además de los 30 defensores asesinados, 105 fueron amenazados. Las amenazas, en su gran mayoría, fueron hechas por bandas criminales –bacrim- (80 casos), actores desconocidos (21 casos) e instituciones de seguridad del Estado, como el Ejército y la Policía (9 casos).
De igual manera, los defensores que registran mayor número de amenazas son aquellos que trabajan en organizaciones no gubernamentales de derechos humanos (35 casos) y líderes campesinos (18 casos).
Las detenciones arbitrarias de defensores de derechos humanos aumentaron durante el primer semestre del presente año en un 33%. El uso arbitrario del sistema penal o las judicializaciones sin el soporte probatorio suficiente, aumentaron en un 28%.
Según la organización Somos Defensores, estos dos hechos aumentaron de manera considerable este año “por la persecución contra los movimientos campesinos de diversos sectores agrarios que se movilizaron en protesta contra las políticas gubernamentales para el sector”.
Las bandas criminales, con 97 casos (50%), son los máximos responsables de los ataques y agresiones contra los defensores de derechos humanos en el país. Este año llama la atención el notable incremento de las agresiones por parte de estos grupos, pues para el mismo periodo de tiempo del año pasado, las bacrim fueron responsables del 45% de los ataques.
A las bacrim les siguen actores desconocidos con 61 casos de ataques registrados este año.
Las guerrillas de las Farc y el Eln aparecen en 5 casos con responsabilidad en las agresiones, dos de ellas homicidios.
Con relación a las zonas del país donde son más frecuentes las agresiones contra defensores de derechos humanos, el departamento del Valle del Cauca lidera con 34 casos las estadísticas del primer semestre de 2014. En esta zona del país hubo un incremento del 100% en el número de agresiones con relación al mismo periodo de tiempo del año pasado, cuando se presentaron 17 casos.
Al Valle del Cauca le siguen Caquetá (21 casos), Santander (pasó de 18 a 25 casos) y Atlántico (pasó de 11 a 17 casos).
El informe de la organización Somos Defensores también da cuenta de que se dio una disminución del registro de casos de agresión en Bogotá, Antioquia y Cauca.
Finalmente, una conclusión clave del informe es que se presentaron agresiones en un mayor número de departamentos, pues se pasó de 20 departamentos registrados en 2013, a 25 departamentos registrados entre enero y junio de 2014.
Según la Unidad Nacional de Protección (UNP), el año pasado brindó
seguridad a 621 defensores de Derechos Humanos que se encontraban
amenazados de muerte en el país. No obstante, 78 fueron asesinados,
incluyendo algunos de los que contaban con esquemas de protección.~
Según la Unidad Nacional de Protección (UNP), el año pasado brindó seguridad a 621 defensores de Derechos Humanos que se encontraban amenazados de muerte en el país. No obstante, 78 fueron asesinados, incluyendo algunos de los que contaban con esquemas de protección. Para el primer semestre de este año, la cifra de defensores asesinados llegó a 30, presentándose una disminución de 7 homicidios con relación al mismo lapso de tiempo del año anterior. De estos 30 defensores asesinados, 3 de ellos contaban con esquemas de seguridad ofrecidos por la UNP.
En Norte de Santander, según el Sistema de Información sobre Agresiones contra Defensores de Derechos Humanos del Programa No Gubernamental ‘Somos Defensores’, han sido asesinados en lo corrido del año dos líderes dedicados a la defensa de las víctimas: Duvis Antonio Galvis, muerto en Sardinata el 26 de enero de 2014 y quien pertenecía a la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat), y Douglas Zuluaga, asesinado en Convención el 10 de abril de 2014, miembro de la Junta de Acción Comunal de la vereda Cartagenita. En ambos casos se desconoce quién los asesinó.
Y es que, según las cifras entregadas por la organización Somos Defensores, durante los primeros seis meses de 2014, 194 defensores fueron víctimas de algún tipo de agresión que puso en riesgo su vida e integridad y obstaculizó su labor de defensa de los derechos humanos en Colombia.
En el primer semestre, el mayor número de casos registrados se presentó en enero con 49 agresiones y mayo con 38; luego están los meses de febrero, marzo y abril con 28 agresiones, y finalmente junio con 23.
Con relación a las agresiones por sexo, se tiene que de los 194 defensores agredidos entre enero y junio de 2014, el 81% fueron hombres y el 19% mujeres.
Esta organización, a su vez, ha identificado siete tipos de agresión contra defensores: asesinatos, atentados, amenazas, detenciones arbitrarias, uso arbitrario del sistema penal, desaparición y robo de información.
Asesinato
Los 30 defensores asesinados en los primeros 6 meses del año han sido hombres. Los dos departamentos más golpeados por estos hechos son Cauca y Valle del Cauca con 4 líderes asesinados cada uno. Les siguen Bogotá y Atlántico con 3; Putumayo, Magdalena y Norte de Santander con 2; y Antioquia, Bolívar, Caquetá, Casanare, Chocó, Huila, Nariño, Risaralda y Santander con 1 homicidio cada uno.
De los 30 defensores asesinados, 18 habían denunciado amenazas. En 4 de estos 18 casos, sus muertes se dieron entre 24 y 48 horas después de haber aparecido sus nombres en un panfleto amenazante. De los 30 homicidios, 24 de ellos fueron cometidos con armas de fuego, 3 con arma blanca y 3 con objetos contundentes.
Los líderes y defensores con mayor número de asesinatos fueron los líderes comunales (8 casos), campesinos (7 casos), e indígenas (6 casos).
Amenazas
Además de los 30 defensores asesinados, 105 fueron amenazados. Las amenazas, en su gran mayoría, fueron hechas por bandas criminales –bacrim- (80 casos), actores desconocidos (21 casos) e instituciones de seguridad del Estado, como el Ejército y la Policía (9 casos).
De igual manera, los defensores que registran mayor número de amenazas son aquellos que trabajan en organizaciones no gubernamentales de derechos humanos (35 casos) y líderes campesinos (18 casos).
Detenciones arbitrarias
Las detenciones arbitrarias de defensores de derechos humanos aumentaron durante el primer semestre del presente año en un 33%. El uso arbitrario del sistema penal o las judicializaciones sin el soporte probatorio suficiente, aumentaron en un 28%.
Según la organización Somos Defensores, estos dos hechos aumentaron de manera considerable este año “por la persecución contra los movimientos campesinos de diversos sectores agrarios que se movilizaron en protesta contra las políticas gubernamentales para el sector”.
Responsables de los ataques
Las bandas criminales, con 97 casos (50%), son los máximos responsables de los ataques y agresiones contra los defensores de derechos humanos en el país. Este año llama la atención el notable incremento de las agresiones por parte de estos grupos, pues para el mismo periodo de tiempo del año pasado, las bacrim fueron responsables del 45% de los ataques.
A las bacrim les siguen actores desconocidos con 61 casos de ataques registrados este año.
Las guerrillas de las Farc y el Eln aparecen en 5 casos con responsabilidad en las agresiones, dos de ellas homicidios.
Principales zonas de agresión
Con relación a las zonas del país donde son más frecuentes las agresiones contra defensores de derechos humanos, el departamento del Valle del Cauca lidera con 34 casos las estadísticas del primer semestre de 2014. En esta zona del país hubo un incremento del 100% en el número de agresiones con relación al mismo periodo de tiempo del año pasado, cuando se presentaron 17 casos.
Al Valle del Cauca le siguen Caquetá (21 casos), Santander (pasó de 18 a 25 casos) y Atlántico (pasó de 11 a 17 casos).
El informe de la organización Somos Defensores también da cuenta de que se dio una disminución del registro de casos de agresión en Bogotá, Antioquia y Cauca.
Finalmente, una conclusión clave del informe es que se presentaron agresiones en un mayor número de departamentos, pues se pasó de 20 departamentos registrados en 2013, a 25 departamentos registrados entre enero y junio de 2014.
