La mañana del 10 de noviembre una remoción de masa originó una tragedia en la finca Flandes de la vereda El Molino en el municipio de Villa Caro.
El deslizamiento de tierra sepultó varias viviendas, en una de ellas cinco miembros de una familia que quedó atrapada.
Adelaida Núñez, de 50 años, junto a sus cuatro hijos, Jhon Jairo Bastos, de 22 años; Yeison Bastos, de 19 años; Yakeline Bastos, de 18 años y Adriana Bastos, de 14 años de edad, fueron reportado como desaparecidos.
Lea: Imparables aumentos de precios de huevos, harina, arroz y café
De inmediato autoridades locales y regionales activaron todas las rutas de búsqueda y rescate, sin embargo, las probabilidades eran mínimas al no tener precisión del lugar exacto donde pudo haber quedado la vivienda.
Para los organismos de socorro y por voz de los residentes las personas pudieron quedar a una profundidad de unos 200 metros bajo tierra y en un perímetro aproximadamente de un kilómetro de terreno.
Este martes, se conoció que el lugar fue declarado camposanto por parte de las autoridades, después de varios e intensos días de búsqueda.
El encargado de declarar este lugar como ‘santo’ o lugar de oración fue el sacerdote de la parroquia San Pedro Apóstol Luis Francisco Vera.
Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion
