Unas 50 familias salieron de la zona rural hacia el casco urbano al encontrarse en medio del fuego cruzado.
Como consecuencia de los enfrentamientos armados entre la guerrilla del Eln y un reducto del Epl conocido como Los Pelusos, por el dominio territorial en varias veredas del corregimiento de Mesitas, comprensión rural de Hacarí, se registra el desplazamiento de personas.
El alcalde Milciades Pinzón Pinzón calculó que unas 50 familias salieron de la zona rural hacia el casco urbano al encontrarse en medio del fuego cruzado.
Los padres de familia no han podido enviar a sus hijos a las escuelas y los profesores han optado por abandonar el sector por la falta de garantías para sus vidas.
“La situación se ha desbordado en las veredas de Limoncitos, El Brillante, La Estación y La Esperanza donde los campesinos salen despavoridos. La Defensoría Regional del Pueblo, la Personería, ni los organismos internacionales de derechos humanos han logrado ingresar para verificar la situación”, advirtió el alcalde.
“Las escuelas están cerradas, los profesores temen por sus vidas, los padres de familia se abstienen de enviar los hijos a las aulas de clases. Estamos cansados de solicitar a los grupos al margen de la ley que excluyan a la población civil del conflicto armado que se presenta en la zona”, reiteró Pinzón.
“No existen condiciones para ingresar a la zona, dicen que vienen muchos campesinos huyendo de las confrontaciones. Nosotros activamos el comité de emergencia y protección para atender a la población desplazada. No contamos con los recursos y se requiere el apoyo de los gobiernos departamental y nacional”, agregó el gobernante hacaritense.
En concepto de Olger Antonio Pérez Quintero, miembro de la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat), las confrontaciones obedecen a la ausencia del Estado y de verdaderas políticas públicas de inversión. “Los caficultores, los cebolleros y todos los campesinos están atravesando por una crisis y el gobierno se empeña a fortalecer el componente militar”, añadió.
