Siempre que llegan las lluvias sobre el piedemonte llanero uno de los sectores más afectado es el trasporte que tiene que sortear todo tipo de dificultades para poder circular por la carretera La Soberanía que une los departamentos de Norte de Santander, Boyacá y Arauca.

El corredor vial es utilizado por el transporte de carga, servicio de pasajeros y vehículos particulares que siempre que llega la temporada de lluvias se ven afectados por los derrumbes de rocas, lodo, material vegetal y hasta pérdida de banca.

El hecho más reciente se registró la tarde del lunes festivo en donde piedras y rocas de varias toneladas mantuvieron cerrado el paso vehicular por más de 20 horas.

El derrumbe ocasionado por las precipitaciones atmosféricas se registró en el kilómetro 114+0759, sector de Las Canoas o Paso del Burro, jurisdicción del corregimiento de Gibraltar (Toledo), distante a 10 kilómetros de Cubará (Boyacá).

El director regional del Instituto Nacional de Vías (Invías), Jesús Edgardo Vergel López, afirmó que desde que le confirmaron la situación inmediatamente envío personal y maquinaria para remover el derrumbe y habilitar el tráfico.

Sobre la situación indicó que hubo desprendimiento del talud superior que cayó sobre la calzada, impidiendo el tránsito vehicular en ambos sentidos.

Para poder reestablecer el corredor, Invías dispuso de una máquina retroexcavadora y de un taladro percutor para perforar y fracturar la roca de mayor tamaño y que estaba sobre la cabecera del puente. De esta manera se logró dar vía para los vehículos que se encontraban represados a lado y lado. 

El vocero de la Asociación Regional de Transportadores de Carga del Centro Oriente de Colombia, Rodolfo Delgado Rozo, le solicitó al Gobierno Nacional que invierta más recursos en la vía, porque se requieren mejorar la transitabilidad.

El transportador sostuvo que con la llegada de las lluvias se va interrumpir el tráfico lo que representará más de 15 horas para llegar de Saravena a Pamplona.