Un enfrentamiento entre el Ejército y un grupo ilegal obligó a 25 familias a huir de la zona, para resguardarse.
Luego del intenso combate que se registró en Hacarí el pasado 18 de julio, la mayoría de las 25 familias desplazadas por el enfrentamiento retornaron a sus viviendas de la vereda Buena Suerte, según indicó el alcalde, Milcíades Pinzón.
El mandatario explicó que el desplazamiento fue interveredal, y los núcleos familiares se vieron obligados a pasar la noche y parte del día con familiares y amigos, en vista de que en el cruce de disparos resultaron afectadas siete viviendas.
“Únicamente regresaron las familias cuyos hogares no tuvieron daños, porque las casas impactadas requieren reparaciones, principalmente en los techos y las paredes”, declaró Pinzón. “Al retirarse ambos bandos, la gente quedó un poco más tranquila”.
Agregó que la Alcaldía activó un comité de justicia transicional, con el fin de hacer un análisis integral de las necesidades de los desplazados.
Así mismo, destacó que ya se hizo un llamado tanto a la Fuerza Pública como a la insurgencia para que se respete a los civiles.