El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) realiza visitas para verificar las condiciones de atención de los 442 niños, niñas y adolescentes que se encuentran en 145 hogares sustitutos de Norte de Santander.
Las visitas se iniciaron el pasado 8 de marzo y durante las siguientes tres semanas a estos hogares llegarán equipos de nutricionistas, trabajadores sociales, sicólogos y defensores de familia, como parte de una acción para complementar los mecanismos de vigilancia y control que hace el ICBF de manera periódica.
Esta tarea busca garantizar que todos los niños que han llegado a los hogares sustitutos en el departamento, “porque sus padres no fueron garantes de sus derechos, reciban el amor, cuidado y protección que necesitan”, señaló la directora regional del ICBF, Beatriz Fiallo Martínez.
Fiallo puntualizó que “tomarán las medidas necesarias para que en los hogares sustitutos se garanticen los derechos de los niños y no se dudará en cerrar aquellas unidades de servicio que no cumplan con los estándares de calidad en la atención”.
Este mismo plan de choque también se viene implementando en otros departamentos de Colombia como Antioquia, César y Santander.
La seguridad en los hogares sustitutos venía siendo cuestionada, tras el caso presentado en Soacha (Cundinamarca), donde un hombre habría abusado sexualmente de dos menores de siete y ocho años que se encontraban al cuidado de uno de estos hogares.
