Fue elegida en octubre, y terminó demandada por presuntas inhabilidades.
La solicitud que había sido presentada para que la alcaldesa de Tibú, Corina Yezmín Durán, fuera suspendida del cargo, mientras se resuelve la demanda de nulidad electoral en su contra, fue rechazada.
Durán hace parte del grupo de al menos nueve mandatarios locales a los que buscan apartar de sus funciones de manera anticipada, por presuntas inhabilidades al momento de su elección.
Según el demandante, Felipe Urbaez Romero, la alcaldesa no podía presentar su nombre en los comicios del año pasado, por cuanto era representante legal de la EDS Campo Dos S.A.S. Zomac y celebró dos contratos con una entidad pública apenas unos meses antes de las elecciones.
Ante este panorama, Urbaez había solicitado, como medida cautelar, la suspensión provisional del acto de elección de la mandataria.
Sin embargo, el Tribunal Administrativo de Norte de Santander consideró que la petición fue extemporánea, puesto que se presentó el 27 de enero y la fecha límite para hacerlo era el 16 de diciembre de 2019.